El expresidente de Perú, Ollanta Humala, y su esposa, Nadine Heredia, se entregaron el día jueves a la justicia, esto después de que se les fueran dictados 18 meses de prisión preventiva mientras se le procesa por supuesto lavado de activos y asociación para delinquir con relación con el caso de Odebrecht.
Humala y Heredia salieron en un vehículo de su domicilio siendo esto inmediatamente después de que el juez Richard Concepción Carhuancho emitiera la orden antes referida, esto para llegar hasta la sede del juzgado en compañía de una caravana que era formada por patrulleros de la policía y automóviles de los medios de comunicación.
El Instituto Nacional Penitenciario dispondrá sobre a qué establecimientos penales serán enviados tanto el ex mandatario como su cónyuge, de quienes se pudo notar que transportaban ropa y frazadas dentro de su automóvil.
Los abogados defensores Julio César Espinoza y Wilfredo Pedraza, quienes criticaron de fuerte manera la decisión de Concepción Carhuancho, han anunciado que apelarán, por lo que este caso tendrá que pasar de forma necesaria por un tribunal de segunda instancia.
“Esta es la confirmación del abuso del poder, al que nosotros haremos frente, en defensa de nuestro derechos y de los derechos de todos”, fue lo mencionado por Humala a través de su cuenta de Twitter.
En la lectura que se pudo prolongar por más de cuatro horas, el juez consideró que la situación de la pareja ha ido empeorando y que existen elementos sólidos para creer que sólo la prisión preventiva podrá garantizar que respondan de manera adecuada al juicio.
Humala y Heredia han sido acusados de recibir tres millones de dólares por parte de la constructora brasileña Odebrecht para la campaña presidencial del año 2011, además de supuestamente “devolver el favor” desde el poder con la adjudicación de un contrato para construir un oleoducto.