Aunque la mayoría los países del Consejo Permanente de la OEA aceptaron en principio tomar como base un proyecto de resolución presentado por Bolivia tras desecharse la propuesta inicial de Panamá, las divisiones evidenciadas días atrás complicaron su aprobación.
Estados Unidos y Perú, entre otros países, mantuvieron su insistencia para que la resolución incluya un exhorto al gobierno del presidente Nicolás Maduro de que se respeten los derechos humanos y libertades como la de expresión y manifestación.
Fuentes consultadas por Notimex dijeron que amén de esas diferencias, todo apunta a que el documento que emanará del Consejo Permanente será una declaración política. Todo apunta a que quedará en eso, indicó la fuente familiarizada con las discusiones de la noche de este jueves y la madrugada del viernes, celebradas a puerta cerrada por petición de Venezuela y varios de los países que conforman la Alianza Bolivariana o ALBA.
La propuesta original de Panamá para que el Consejo discutiera la convocatoria de una reunión de consultas de cancilleres quedó desechada, lo mismo que el eventual envío de una misión, luego del rechazo expresado por Maduro para aceptar la mediación de la OEA. Eso no va a pasar, dijo el embajador de México, Emilio Rabasa, al ser cuestionado durante un receso sobre la posibilidad de que los cancilleres pudieran ser convocados.
Por su parte, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, dejó en claro que el organismo hemisférico está muy lejos de invocar la Carta Democrática Interamericana como lo ha demandado la oposición venezolana.
De igual modo descartó que el Consejo Permanente pueda adoptar medidas que sean inapropiadas para el gobierno del presidente Nicolás Maduro. Estamos muy lejos de eso (de invocar la Carta Democrática), y no creo que el Consejo vaya a votar una medida que sea inapropiada para Venezuela, dijo Insulza a reporteros más temprano.
Hablando por separado ante el Consejo Permanente, la embajadora estadounidense, Carmen Lomellín, hizo notar el creciente número de muertos que se han suscitado en Venezuela en las últimas semanas a partir de la intensificación de las manifestaciones contra el gobierno de Maduro.
Nos preocupa muy gravemente lo que aparenta ser una tendencia del personal de seguridad a emplear fuerza excesiva, dijo Lomellín, aludiendo a las 21 víctimas fatales que han ocurrido en Venezuela desde el pasado 19 de febrero. La diplomática refirió, además, a las tácticas represoras del gobierno venezolano contra la oposición, así como las restricciones que ha venido imponiendo sobre la libertad de prensa y de expresión.
Por ello consideró esencial que este Consejo y que esta Organización se muestren firmes a favor de los principios que han existido en este hemisferio: gobernabilidad democrática, respeto a la disensión pacífica y firme apoyo a la libertad de expresión y a la libertad de prensa, indicó.
Asimismo, reiteró el llamado de su gobierno para la inmediata liberación de manifestantes y líderes de la oposición detenidos en días recientes, incluyendo a Leopoldo López, líder del partido Voluntad Popular.
Por separado, en un breve encuentro con periodistas, Lomellín evitó anticipar el resultado de la reunión del Consejo Permanente dadas las fuertes divisiones existentes entre los países miembros, y dijo que espero que de esta reunión, lo que salga sea un llamado al respeto de las libertades de los venezolanos.