El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su familia salieron este viernes de vacaciones hacia la isla Marthas Vineyard, en Massachusetts, donde pasarán más de dos semanas.
Sé que me van a extrañar, dijo Obama a los periodistas que cubrían la Casa Blanca durante la firma de una ley para preservar tierras silvestres en Idaho, en el último evento oficial antes de iniciar 17 días de descanso.
El mandatario, su esposa Michelle y sus hijas Sasha y Malia abordaron el avión presidencial en la Base Aérea Andrews un día antes de lo planeado originalmente.
La familia presidencial vacaciona en la misma propiedad alquilada en otras ocasiones, una casa valuada en 12 millones de dólares de siete recámaras, nueve baños, canchas de basquetbol y tenis en Chilmark, una localidad de 843 habitantes en la isla situada en el popular destino vacacional de Cape Code.
El presidente Obama no tiene programado eventos oficiales, pero viaja con sus principales asistentes que le mantendrán informado de lo que ocurre en el país y en el mundo.