Poco después que la Cámara de Representantes aprobó el paquete fiscal, el mandatario abordó el avión presidencial en ruta a Honolulu, donde el resto de la familia Obama pasa sus vacaciones desde hace tres semanas.
Barack Obama y su familia viajaron a la isla el pasado 22 de diciembre y se instalaron en su casa de la playa en Kailua, a 24 kilómetros de Honolulu, donde el mandatario pasó parte de su infancia.
Menos de una semana después, el presidente se vio forzado a interrumpir su estancia y volver a Washington para presidir las negociaciones con el Congreso en torno al “precipicio fiscal“.
Su regreso, sin embargo, fue sorpresivo debido a que se esperaba que permaneciera en la capital del país hasta la promulgación de esta ley, sin que hasta ahora la Casa Blanca haya anunciado la fecha para ello.