Según la Casa Blanca, el viaje de ida y vuelta de Obama a Chicago, su ciudad de adopción, para ofrecer un discurso de despedida tras dos mandatos como presidente fue la 445ta vez que voló a bordo del llamativo avión familiar, blanco y azul, del gobierno estadounidense. La aeronave responde al nombre “Air Force One” siempre que a bordo viaja un presidente en activo.
Pero esto ya no volverá a ocurrir más para Obama. El del martes fue casi con toda seguridad su último viaje antes de abandonar el cargo.
Hasta el vuelo de Chicago, el Air Force One había volado 2.799 horas y seis minutos como Obama como pasajero, o el equivalente a 116 días.
El mandatario viajó a 56 países diferencies y 49 estados.