En su discurso en la Casa Blanca, durante la ceremonia con motivo de la celebración del 5 de Mayo, el mandatario reiteró el llamado a sus simpatizantes para aumentar la presión a los republicanos, que se han resistido hasta ahora a cualquier intento para empujar este debate.
Estoy convencido de que la prosperidad y la seguridad de Estados Unidos depende de una amplia reforma migratoria de sentido común, dijo ante cientos de invitados congregados en el Salón Este de la residencia presidencial, la cual se inundó este día con los olores, sabores y sonidos de la comida y música mexicana.
El mandatario recordó que el año pasado, gracias a un esfuerzo bipartidista, el Senado aprobó una iniciativa de ley de reforma migratoria que, dijo, ofrece beneficios para todos, para los inmigrantes, para los negocios y para la economía.
Sin embargo, hasta ahora los republicanos en la Cámara de Representantes se han negado a permitir que avance una reforma significativa, dijo Obama, quien hizo notar que la oposición entre estos legisladores no es generalizada.
Sabemos que hay republicanos en la Cámara de Representantes que quieren la reforma migratoria y yo voy a trabajar con todos aquellos que tengan intenciones serias para fortalecer nuestra frontera, modernizar nuestro sistema migratorio, mantener familias unidas y hacer lo correcto a favor de la economía y seguridad a futuro, indicó.
El mandatario pidió a los presentes que lo ayuden a movilizar a los estadounidenses en los próximos meses en un esfuerzo que involucre a líderes empresariales y a todos aquellos que estén a favor de la reforma migratoria.
Sobre la celebración, Obama hizo notar el lazo que existe detrás de la victoria del ejército mexicano sobre el francés en la ciudad de Puebla en 1862 y el futuro de la nación.
Si lo opuesto hubiera pasado, nuestras historias serían muy diferentes, dijo el mandatario haciendo notar la colaboración que existió entonces entre los gobiernos de Abraham Lincoln y el presidente mexicano Benito Juárez.
Al evento asistieron celebridades del espectáculo, como Emilio y Gloria Estefan; miembros de la fracción hispana del Congreso, demócratas y republicanos; el embajador de México en Washington, Eduardo Medina Mora, y el subsecretario de Relaciones Exteriores, Sergio Alcocer.