El debate sobre el consumo de azúcar se ha tornado amargo en un país con una de las mayores tasas de obesidad en el hemisferio. Las nuevas reglas de etiquetado enlistan la cantidad de ingesta promedio diaria de azúcar y de otros productos.
Pero para los etiquetados se asume que el promedio diario de consumo aceptable es de 360 calorías de azúcar, lo que equivale a unos 90 gramos. Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud ha propuesto que ese consumo diario sea de tan sólo 25 gramos.
Expertos publicaron el lunes un desplegado en diarios de México en el que aseguraron que el nuevo etiquetado “aumenta el riesgo de obesidad y diabetes”.