Los niños latinos tienen el mayor índice de mortalidad en accidentes automovilísticos en Estados Unidos, debido a que sus padres incumplen las medidas de seguridad obligatorias, según un estudio divulgado aquí.
El 46 por ciento de los menores hispanos que murieron en accidentes de auto entre 2009 y 2010 carecían de asiento especial o viajaban sin el cinturón de seguridad, según el informe Signos Vitales, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El reporte destacó que los adultos al cuidado de los menores hispanos son los que menos observan la ley que obliga al uso de un asiento especial y cinturón de seguridad para menores de ocho años, aunque en algunos estados la edad obligatoria es de seis años.
En contraste, sólo 26 por ciento de decesos en accidentes de tráfico entre la población infantil blanca y 45 por ciento entre los afroestadounidenses se debieron a la falta de dichas medidas.
Ningún niño debería morir en un choque automovilístico por no ir en un asiento de seguridad o no tener el cinturón puesto de manera adecuada. Sin embargo, lamentablemente, eso pasa cientos de veces al año en Estados Unidos”, señaló el director de los CDC, Tom Frieden.
Según el estudio, nueve mil niños estadounidenses menores de 12 años murieron en choques automovilísticos entre 2002 y 2011, pese a que la mortalidad infantil en accidentes de tráfico bajó 43 por ciento en ese lapso.
Los padres y los que cuidan a los niños tienen un papel importante en mantenerlos seguros en el auto, indicó por su parte el médico Daniel Sosin, director interino del Centro Nacional para la Prevención y el Control de Lesiones de los CDC.
El reporte citó un estudio independiente, que mostró que en los cinco estados que aumentaron a siete u ocho años la edad requerida para usar asientos elevados o de seguridad, su uso se triplicó, mientras que las muertes y lesiones graves disminuyeron en 17 por ciento.
En Estados Unidos, los niños desde el nacimiento hasta los dos años deben viajar en un asiento de seguridad mirando hacia atrás, y a partir de esa edad el asiento elevado debe ver hacia adelante.
Los CDC analizaron datos recolectados por la Administración Nacional de Seguridad Vial para determinar la cantidad y la tasa de muertes de ocupantes de automóviles, así como el porcentaje de muerte infantil.