“La ley intenta una regulación, no es que sea un ?viva la pepa?, sino regular algo que ya existe y está en nuestras narices”, afirmó el mandatario al aclarar que la legalización no implica que la marihuana circulará sin control en el país. Agregó que lo más importante es “terminar con la clandestinidad. Identificar y tener un mercado a la luz del día, porque si el consumidor está identificado podemos influir en él cuándo se pase de la raya”.
José Mujica consideró que “una cosa es que (el consumidor) se fume un porro y la otra es que se hunda en el vicio y nadie le tire una soga”. Luego del debate sobre la legalización que el oficialista Frente Amplio ganó anoche en la Cámara de Diputados con 50 votos a favor y 46 en contra, la iniciativa pasó al Senado, en donde se discutirá antes de fin de año.
Si la cámara alta aprueba la ley, Uruguay se convertirá en el primer país del mundo que legaliza la producción, venta y consumo de esta droga. Mujica también se refirió a las encuestas que demostraron que el 63 por ciento de los uruguayos está en contra de la ley. “Como somos un país de viejos nos cuesta entender a los jóvenes y la gravedad del problema es realmente importante, nosotros no vamos a decir que la maruja es buena”, aclaró.
El problema, agregó, es que “es que los que consumen no dan bola a los consejos y no por ello hay que dejarlos en banda. Y están atrás de la aventura de comprarle al narcotraficante por aquí y por allá porque es clandestino”.