El Secretario General de la ONU proclamó el día 25 de cada mes como Día Naranja, para hacer conciencia y poner fin a la violencia contra las mujeres. Con la ola de feminicidios reciente y la violencia diaria, no es para menos.
Las cifras son escandalosas: aproximadamente 35% de las mujeres en el planeta han sufrido violencia física o sexual, por su pareja o por otras personas, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), organismo que lanzó en 2008 la campaña internacional ÚNETE para “sensibilizar a la población y motivar a los gobiernos a invertir más recursos en programas de prevención” de la violencia contra las mujeres.
La convocatoria es para que todas las personas utilicen un listón o una prenda anaranjada el día 25 de cada mes como símbolo de esta lucha. Al respecto, el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) ha hecho un llamado a la población mexicana para sumarse a la campaña de la ONU.
Incluso, organismos como el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) hacen un llamado no solo a portar prendas de este color, sino a estar alertas e identificar todas las formas de violencia contra las mujeres y niñas, así como poner fin a la desigualdad de género.
De acuerdo con reportes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), del año 2000 al 2015 se cometieron 28 mil 710 asesinatos violentos contra mujeres, es decir cinco diarios. Las cifras reflejan un aumento de 85% en estos delitos, al pasar de mil 284 homicidios ocurridos en el año 2000; a dos mil 383, en 2015.
María de la Luz Estrada, fundadora y coordinadora ejecutiva del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), estimó que la cifra actual podría superar 30 mil homicidios violentos contra mujeres.
Estrada señaló que “un aspecto fundamental que debe ser incorporado en los diagnósticos e investigaciones que se realicen para comprender el problema de la violencia feminicida, es la desaparición de niñas y mujeres.”