Las protestas tuvieron lugar en varias ciudades del país, donde la indignación por la corrupción en el gobierno continuó en aumento esta semana con la publicación en internet de supuestas conversaciones telefónicas de Erdogan y su hijo, que revelan corruptelas.
La nueva grabación fue difundida en el sitio web de vídeos YouTube la noche del miércoles por un usuario anónimo, y en ella se escucha la voz de dos personas que al igual que en las anteriores supuestamente corresponden a Erdogan y su hijo Bilal.
En la audio cinta, Erdogan pide a su hijo que no acepte los 10 millones de dólares que le está ofreciendo Sitki Ayan, propietario de la firma turca Som Petrol, a quien recientemente el gobierno otorgó incentivos libres de impuestos para construir oleoductos en Irán.
Erdogan argumentó que la cantidad era demasiado baja y aseveró no lo tomes, tiene que dar lo que prometió. Si no lo hace, no hay necesidad (de aceptar)… Otros lo dan, ¿por qué él no puede? ¿qué cree que es este negocio?… No te preocupes, ya caerá de rodillas.
De acuerdo con el diario local The Todays Zaman, un usuario de Twitter que utiliza el pseudónimo de Haramzadeler ha estado filtrando las supuestas grabaciones de voz del primer ministro turco.
En la primera audio grabación, difundida en YouTube el pasado lunes, Erdogan y Bilal discuten la forma de esconder millones de euros en efectivo que están en una casa, aunque sin revelar la dirección del inmueble.
Después de que las grabaciones comenzaron a circular en la web, la oficina del primer ministro turco aseguró que las cintas son fabricadas y que se emprenderían acciones legales en contra de quienes resulten responsables.
Erdogan declaró a la prensa que se trataba de una conspiración de enemigos turcos y extranjeros para derrocar a su gobierno, pero fue más allá calificando el hecho como un acto de traición en mi contra.
La Fiscalía de Turquía lanzó una investigación sobre las grabaciones telefónicas, mientras que los partidos de oposición exigieron la dimisión de Erdogan y su gabinete, llamado que miles de personas han repetido en las calles a través del país desde el pasado martes.