No nos vamos a preocupar hasta 2050. Sería una irresponsabilidad mayor. Tenemos que sentar las bases ahora, indicó el funcionario en entrevista con Notimex.
Osornio encabeza la delegación de México en la 33 Conferencia Regional de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) para América Latina y el Caribe, que culminará mañana viernes.
México será sede de la próxima conferencia regional del organismo, según acordó por unanimidad la cita de Santiago, misma que eligió a Osornio como vicepresidente.
El rol protagónico asumido por México en la FAO, indicó el funcionario mexicano, corresponde al liderazgo en política internacional del presidente Enrique Peña Nieto y al trabajo muy subrayado en combate a la pobreza y el hambre.
Obedece agregó a un ejercicio no aislado, en donde el presidente Enrique Peña Nieto está tratando de recuperar, y lo hace de manera muy brillante, el liderazgo en América Latina.
Apuntó que a Peña Nieto lo vemos muy activo, rehaciendo una vieja escuela de relaciones exteriores mexicanas, recuperando terreno, que es muy importante para el país de detener otras alternativas de comercio, de inversión, de liderazgo.
Para cumplir la tarea de alimentar a su población, México cuenta con cuatro millones de productores, detalló.
En la actualidad el peso de la agricultura en el Producto Interno Bruto (PIB), dijo, es relativamente pequeño: de 3.0 por ciento cuando hablamos de producción primaria y de 9.0 cuando hablamos del sector agroalimentario.
Explicó que el gobierno mexicano apoya un millón 750 mil proyectos productivos en el campo y a un millón y medio de productores, en el marco de su lucha por la erradicación del hambre y contra la inseguridad alimentaria, la malnutrición y la pobreza extrema.
La cruzada es una actividad de todas las dependencias del gobierno federal, añadió al afirmar que estamos focalizando recursos en las comunidades de alta y muy alta marginación y dentro de unos meses estaremos con agricultura periurbana en cinturones de miseria en unas 40 ciudades.
Por otro lado, el subsecretario Osornio dijo que hay un proyecto de reforma del campo mexicano, que es motivo de mucha controversia, pero lo tenemos que plantear para que el país, medite, razone y reforme lo que tenga que reforzar.
Están los temas del uso eficiente del agua, la producción de semillas, generar fertilizantes nitrogenados, tenemos que avanzar en tecnología y tenemos que cambiar a nuestros productores también, indicó Osornio.
Si les enseñamos nuevas cosas (a los productores), estaremos cambiando sus aptitudes, pero si les despertamos el deseo de ser más productivos, estaremos cambiando actitudes, puntualizó.
México es un país muy vulnerable al cambio climático. Más de la mitad del territorio, o es desierto, es semidesierto o está en proceso de desertificación, señaló.