Se han empezado a formar los principios básicos para la comercialización de azúcar por parte de Estados Unidos y México.
Los equipos de negociadores por parte de ambos países también estarán encargados de revisar, el ahora polémico, Tratado de Libre Comercio (TLC).
El plazo que se habían dado ambas partes para responder al litigio originalmente expiraba este lunes, aunque ambas partes han acordado un día más de prórroga para que esto suceda.
“Hemos acercado posiciones de una manera significativa“, indica el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross.
Algunas fuentes cercanas al Gobierno mexicano se pronuncian de la misma manera que el secretario estadounidense, además afirman que Ildefonso Guajardo, secretario de economía de México y su homólogo estadounidense han estado planeando el salir mañana con la prensa para dar algunas comparecencias.
De poder concretar este convenio, éste llegaría en un momento más que fundamental para las relaciones económicas de ambos países, pues estaría sucediendo momentos antes de que se revise el TLC, algo más que significativo para la economía, no solo de México, también de la Unión Americana y de Canadá, países inmiscuidos en el mismo.
Esta noticias sería la mejor para los productores de azúcar mexicanos, los cuales podrían seguir exportando su producto sin traba alguna al vecino que se encuentra al norte de la República Mexicana.
Esto también significa una gran noticia para los consumidores estadounidenses, sobre todo las grandes empresas como Coca Cola, la cual no tendría que buscar otra fuente de producción.
Este tratado estaba en urgencia de ser revisado y en su caso, renovado, pues su fecha de expiración estaba a punto de ocurrir. Si es verdad que el arreglo comercial no es algo oficial y que no tendría un mayor impacto en la decisión por parte de Donald Trump acerca de separarse o no del TLC, sí podría ejercer cierta presión sobre el mandatario estadounidense al proyectarse la importancia comercial de la relación México-Estados Unidos.