Varios grupos relacionados a la posesión de mascotas se oponen a una nueva ley, avalada por la Asamblea Legislativa capitalina, que requiere esterilizar, implantar chips y registrar a perros y gatos en el Distrito Federal.
En un desplegado pagado y publicado el jueves en diarios mexicanos, organizaciones de criadores y veterinarios advirtieron que la ley puede poner en riesgo miles de trabajos en clínicas, salones para mascotas, además de instalaciones de entrenamiento y crianza.
Algunas de las organizaciones sostienen que la ley fue aprobada a principios de mayo a prisa y sin realizar consultas.
La ciudad de cerca de nueve millones de habitantes tiene problemas importantes con perros y gatos callejeros, maltrato animal y venta ilegal de mascotas.
Criadores legales dicen que los problemas podrían ser mayores debido a que la ley forzaría a instalaciones legítimas a salir del negocio o llevar a propietarios a abandonar a los animales por temor a que sean multados en caso de que no cumplan con la norma.