En una videoconferencia privada en el Consejo de Seguridad, Eliasson reportó desde la capital ucraniana, Kiev, que además de la distensión militar es necesario terminar con la retórica provocadora que sólo ha servido para elevar las tensiones en ese país de Europa Oriental.
En un resumen del mensaje de Eliasson difundido por la ONU, el organismo manifestó que tras reuniones con líderes políticos en Ucrania el funcionario había subrayado la urgente necesidad de una distensión y de una solución política a la crisis actual en el país.
Expresó que pese a que la situación en Kiev es estable, hay perturbadores reportes de otras partes del país, principalmente de Crimea, donde se han reportado bloqueos a las bases militares de Ucrania por elementos armados con uniformes sin insignias.
Mencionó asimismo las amenazas recibidas por el enviado especial de la ONU, Robert Serry, durante su visita a Crimea, lo que finalmente lo hizo abandonar esa península y dirigirse a Kiev.
Eliasson consideró asimismo que es fundamental que se respete la unidad, diversidad e inclusión en Ucrania, y resaltó la importancia de que todas las partes en el país, y todos los segmentos de la población, tengan la oportunidad de participar en la construcción del futuro nacional.
Destacó además que la ONU ha establecido consultas con la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa para apoyar el respeto a los derechos humanos, supervisar la seguridad y abordar las preocupaciones en torno a los derechos de las minorías en el territorio ucraniano.
Por su parte, en un encuentro con la prensa al final de las consultas, el representante permanente del Reino Unido ante la ONU, Mark Lyall-Grant, declaró que su gobierno ha pedido a Rusia que distienda la militarización de la crisis en Ucrania y que negocie con los actuales líderes de ese país.
Llamó a Rusia, además, a detener su presencia militar en Crimea, a comprometerse con la unidad territorial de Ucrania y a que permita el acceso de observadores internacionales, así como rechazar el referendo programado en Crimea para su posible anexión a territorio ruso.
Mientras tanto, la representante permanente de Estados Unidos ante la ONU, Samantha Power, urgió a Rusia a que permita observadores internacionales, y a que reduzca las tensiones militares en el país.
No es demasiado tarde, pero cada día, en particular con los movimientos sucedidos hoy en Crimea, el riesgo de un escalamiento militar aumenta, aseveró Power.
Como respuesta, el representante ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, afirmó que su gobierno no reconoce a las autoridades actuales en Ucrania, y que la decisión del referendo fue tomada por el Parlamento de Crimea, por lo que su país aún no tiene una posición oficial al respecto.