El hecho que la reina viaje en su automóvil sin utilizar un cinturón de seguridad podría ser una ilegalidad, aunque la reina goce de inmunidad, pero para nada se puede tomar como una emergencia.
Esta es la última llamada “absurda” que la policía británica ha recibido en el 999, siendo este un número destinado para las emergencias, pero que algunos ciudadanos han utilizado para hacer bromas y tomarlo con algo de humor, denunciando situaciones como que “un payaso en la calle les ha vendido un globo muy caro”, afirman desde la Policía Metropolitana de Londres (Met).
La policía de Londres ya lleva años estableciendo las 10 llamadas más ridículas que han recibido en el teléfono de emergencias, The Telegraph ha publicado este último ranking:
- Una mujer que ve un payaso en la calle que vende globos por 5 libras, mucho más caros que los que venden otros payasos.
- Una mujer que asegura haber comprado un kebab frío y la tienda no quiere cambiárselo por otro.
- Un hombre que llamó al 999 porque le habían dicho que llamara al 111 pero no se sabía el número.
- Un ciudadano que llamó al 999 a las cuatro de la madrugada de un sábado y preguntó: ¿Cuál es el mejor lugar para comprar ahora un sándwich de beicon?
- Un hombre que aseguró que se le había atascado una moneda de 50 peniques en la lavadora de una lavandería y quería que la policía la recuperara.
- Una persona que llamó porque no había sonado su despertador, se había levantado tarde y quería que la policía la llevara al aeropuerto porque iba a perder un vuelo.
- Varias personas han llamado porque se había encendido la luz del coche que indica que les queda poco combustible.
- Un hombre que aseguraba no tener cambio para pagar el estacionamiento y denunciaba que los empleados le habían secuestrado y no le dejaban salir gratis.
- Una mujer que quería que la policía se encargara de un par de zorros ruidosos que estaban fuera de su casa y no le dejaban dormir.
- Una mujer que denunció que había hombres en su casa intentando llevársela. Estos hombres eran agentes de la policía que habían acudido a arrestarla.