La promoción de bebidas azucaradas y comidas rápidas se irá eliminando según las nuevas reglas, que se proponen garantizar que dicha comercialización se atenga a las normas de salud que ya se aplican a los alimentos escolares.
Eso significa que la pizarra de un encuentro deportivo de la escuela no podrá publicitar Coca-Cola, por ejemplo, pero sí Diet Coke o agua Dasani, también propiedad de Coca-Cola Co. Lo mismo se aplicará a una máquina expendedora. Las tazas, los carteles y los menús que promuevan alimentos que no se atengan a las normas también serán eliminados paulatinamente.
El 93 % de dicha promoción en las escuelas apunta a las bebidas, y muchas compañías de gaseosas ya han comenzado la transición en sus ventas y propaganda comercial para las escuelas de las bebidas azucaradas a sus productos más saludables. Las empresas invierten unos 149 millones de dólares anuales en su comercialización en las escuelas, según el Departamento de Agricultura.
Las reglas propuestas son parte de la iniciativa Let’s Move contra la obesidad infantil de la primera dama Michelle Obama, que cumple cuatro años esta semana. La primera dama y el secretario de agricultura, Tom Vilsack, anunciaron las nuevas reglas en un acto en la Casa Blanca.
“La idea es sencilla: nuestras aulas deberían ser lugares saludables donde los niños no sean bombardeados con avisos de comida chatarra”, afirmó Michelle Obama. “Cuando los padres trabajan duro para enseñar hábitos saludables a sus chicos en la casa, su empeño no debería caer en saco roto por mensajes insalubres en la escuela”.
Las reglas también permitirán más acceso de niños a almuerzos gratuitos y asegurarán que las escuelas practiquen políticas de bienestar.
Las reglas fueron propuestas poco después de las regulaciones del Departamento de Agricultura que exigen que los alimentos en el almuerzo escolar sean más saludables.
Las reglas que entrarán en vigencia en el próximo año escolar ofrecerán otros alimentos más saludables en las escuelas, incluso en las máquinas expendedoras y una fila separada “a la carta” en la cafetería. Los límites de calorías, grasa, azúcar y sodio en alimentos y bebidas vendidos durante la jornada escolar en 100.000 escuelas deberán cumplir con las regulaciones.
Las reglas que exigen alimentos saludables han sido objetadas por conservadores que opinan que el gobierno no debe dictar lo que comen los niños.