Un alto líder del cártel Los Zetas, llamado Marciano Millán recibió hoy una sentencia de siete cadenas perpetuas por parte de un juez federal en el estado de Texas, el delincuente operaba en la comunidad fronterizas de Piedras Negras, Coahuila, fue culpado por varios asesinatos y diversos actos violentos.
“Sin misericordia o aflicción, asesinó brutalmente a todos y cada uno según le convenía a él y a su cártel, a veces infligiendo el más cruel dolor, obligando a los familiares a ver a sus seres queridos ser asesinados”, fueron las palabras del procurador federal Richard L. Durbin, al momento de anunciar su sentencia.
En julio del 2016, después de ser sometido a un juicio con duración de tres tres semanas, el apodado como el “Chano” fue declarado culpable por diez cargos en su contra, entre los cuales destacan homicidio, trafico de armas y de diferentes drogas como lo son marihuana, cocaína y metanfetaminas, pero hasta ahora le dictaron sentencia.
Aunque los delitos de homicidio los habría cometido fuera del territorio estadounidense (en México), el gobierno norteamericano lo pudo condenar, ya que varios de estos asesinatos estarían relaciones con un caso de conspiración en Estados Unidos.
Según los informes, Marciano Millán era miembro activo de los Zetas y actuaba como sicario, narcotraficante y distribuidor de armas, hasta que el 2013 fue nombrado como el jefe de la plaza en Piedras Negras Coahuila.
Las autoridades de Estados Unidos le achacan también la importación de mis de 100 toneladas de marihuana y de por lo menos 40 mil kilogramos de cocaína.
El “Chano” sería el responsable de por lo menos 29 homicidios entre 2009 y 2015, este peligroso delincuente ha permanecido bajo custodia de las autoridades federales de Estados Unidos, desde que fue arrestado en San Antonio, Texas, el pasado 15 de julio del 2015.