TORONTO (AP) Justin Trudeau fue juramentado el miércoles como primer ministro de Canadá, siguiendo los pasos de su famoso padre y restaurando la identidad liberal del país luego de casi 10 años de gobierno conservador bajo Stephen Harper.
Trudeau, de 43 años y quien trabajó como maestro de escuela y ha sido parlamentario desde el 2008, es el segundo primer ministro más joven en la historia del país.
Es hijo del difunto Pierre Trudeau, quien ascendió a primer ministro en 1968 con gran apoyo popular. Estuvo en el cargo hasta 1984, salvo una breve excepción, y es uno de los pocos primeros ministros de Canadá conocido en el exterior, pues tenía gran carisma que le valió comparaciones con John F. Kennedy.
El nuevo primer ministro podrá restaurar el legado liberal de su padre, que ha sido criticado en los últimos 10 años cuando ha dominado el gobierno conservador de Stephen Harper.
Su elección marca un cambio generacional que quedará reflejado también en el gabinete. Sus ministros tendrán, en su mayoría, edades entre 35 y 50 años.
El exlíder liberal Stephane Dion, que perdió una elección por el partido previamente, es el nuevo canciller, mientras que el empresario de Toronto Bill Morneau es el nuevo ministro de finanzas. Harjit Sajjan, un ex soldado y ex policía, será el ministro de defensa. A cargo de la cartera de comercio internacional estará la experiodista Chrystia Freeland.
Mujeres forman la mitad del nuevo gabinete, que se espera tenga su primera reunión el miércoles por la tarde y seguidamente se presente ante la prensa.
Harper dejó el puesto momentos antes de la juramentación de Trudeau.
Trudeau, su esposa y su nuevo gabinete llegaron al Rideau Hall en autobús para la ceremonia de juramentación y fueron recibidos por una gran muchedumbre.
La victoria de Trudeau deberá mejorar las relaciones bilaterales con Estados Unidos. Harper estaba furioso por la renuencia del presidente estadounidense Barack Obama a aprobar el oleoducto Keystone XL desde Alberta a Texas y eso dañó los lazos. Aunque Trudeau respalda el proyecto, dice que las relaciones comunes no deben depender del mismo.
Harper, uno de los gobernantes occidentales de más tiempo en el cargo, peleó duramente para revertir la imagen liberal de Canadá, reduciendo los impuestos a las corporaciones y a las ventas y sacando al país de un acuerdo global sobre cambios climáticos. Trudeau aprovechó un apetito de cambio en el país con un plan para rechazar la austeridad y gastar miles de millones en infraestructura, previendo déficits por tres años a más para conseguirlo.