* Canta a dueto con Lupillo Rivera, Lucía Méndez y Espinoza Paz
México, 18 Sep (Notimex).- El cantautor mexicano Juan Gabriel, uno de los más reconocidos a nivel internacional, sorprendió con un espectacular “show” a las 10 mil personas que asistieron este jueves al Auditorio Nacional de esta capital.
En el primero de seis conciertos que ofrecerá en este recinto para finalizar su gira “Juntos”, el llamado “Divo de Juárez” interpretó, durante dos horas con 40 minutos, unas 30 canciones del repertorio musical que ha creado en 44 años de trayectoria.
Aproximadamente 70 artistas en escena, entre músicos, coristas, cantantes y bailarines, lo acompañaron en la noche que JuanGa también celebró a México en ocasión del 205 aniversario de la gesta de Independencia.
Ante una sala pletórica, el espectáculo inició con un número folclórico y minutos después, el ídolo apareció sobre el escenario para recibir la ovación de sus fans.
“Buenas noches, México”, dijo, para luego entregar “Por qué me haces llorar” mientras bebía de una copa de cristal y cuyo líquido derramó al finalizar el tema.
“Gracias por venir, amores”, añadió un emocionado Juan Gabriel, quien lució un sólo cambio de vestuario: traje negro con brillos y camisa de color azul rey.
Con el acompañamiento del mariachi de 20 elementos, cantó “Así fue”, después “Mi fracaso”, “Insensible” y en recuerdo a Lucha Villa, a quien definió como “una gran señora”, fascinó con “Ya no me interesas”, su composición que ella popularizó.
“¿Tienen ganas de cantar conmigo?”, preguntó el artista, cuando para entonces sonaban en cada rincón del majestuoso lugar, los primeros acordes de “La indiferencia”, obra que con el paso del tiempo, se ha convertido en himno para los adoloridos en el amor.
Apoyándose en la letra que se proyectó a través de la pantalla central del escenario, el público la coreó de principio a fin, así como “Tu abandono” que puso el toque rítmico a la velada en la que también figuraron nueve coristas.
Mientras se abanicaba, expresó unas palabras a sus seguidores: “Gracias por cantar mis canciones, amores. Muchas, pero muchas gracias. Quiero presentarles a un amigo, pero muy amigo. Seguramente ustedes lo conocen y los que no, lo van a conocer. Es un mexicano, canta muy bonito, es Lupillo Rivera”.
Con una amplia sonrisa, el cantante pisó el escenario para compartir “Si me quieres ver muy triste”, pero conmovido hasta las lágrimas, interrumpió el curso de la melodía para decirle a Juan Gabriel lo que pensaba de él:
“Para mí es un gran halago poder decir que toda mi vida supe de su música, es impresionante estar aquí con usted”, resaltó Lupillo para luego retirarse y que el cantautor rindiera una oda al despecho mediante “Inocente pobre amigo”, que terminó con la gente de pie y fanfarrias.
Tras el solo de guitarra de uno de sus músicos, en las pantallas sobre el templete se mantuvieron fijas las fotografías de “la española más mexicana”, Rocío Dúrcal (1944-2006), quien durante varios años interpretó algunos de sus máximos éxitos.
En recuerdo a ella y con dedicatoria a los papás, entregó “Costumbres”. Luego bajó por segundos de la tarima para saludar de mano a una pequeña bebé.
“No vale la pena”, “Caray”, “No te vaya a suceder”, “Esta noche voy a verla”, “Juntos” y “Me gustas mucho” continuaron en el programa hasta que imágenes de María Félix, Dolores del Río, Katy Jurado y Marga López, entre otras personalidades del cine mexicano, engalanaron las pantallas.
Así les rindió homenaje a través del tema “Tus ojos mexicanos lindos”, aderezado con un grupo coreográfico femenino.
Después de “He venido a pedirte perdón”, se remontó a finales de los años setenta cuando fascinó a sus fans con “Frontera” en alusión a Ciudad Juárez.
Acto seguido, rindió “un pequeño tributo a la grandeza de Tin Tan” con la presencia de un pachuco que a ritmo de mambo mostró sus mejores pasos y Juanga no se quedó atrás, pues también hizo gala de sus movimientos más sensuales.
Con toda una puesta en escena en mención a la telenovela “El extraño retorno de Diana Salazar” (1988), Lucía Méndez, enfundada en un elegante vestido rojo, hizo su arribo para interpretar el emblemático “Un alma en pena”, compuesto por Juan Gabriel.
El momento fue inolvidable. Hace muchos años que los compadres no se veían, según lo manifestaron. Por lo que el agasajo no sólo fue para ellos, también para sus respectivos fans, aunque la voz de Lucía fue opacada por los coristas y el mismo anfitrión del evento.
“Estoy muy emocionada por estar con el cantante más grande de todos los tiempos, con Juan Gabriel. Arreglarme para él, aprenderme ‘Un alma en pena’, que es una canción difícil y volverlo a ver”, subrayó la actriz y cantante.
“No tengo dinero”, a dueto con los colombianos de Zona Prieta y a ritmo de hip hop, encendió los ánimos de los asistentes para después invitarlos a corear “Buenos días, señor sol”.
Y ahora llegaba el turno de Espinoza Paz para cantar a dueto “Siempre en mi mente”, convirtiéndose así en uno de los momentos más conmovedores de la noche.
“Voy a tomar un poquito de agua”, dice el artista, previo a “Yo no nací para amar”, que con arreglos en saxofón y trompeta, provocó el momento sensual en JuanGa, quien poco a poco fue desabrochando los botones de su chaleco que después lanzó a las butacas.
No conforme, solicitó el apoyo de una mujer de entre el público para que lo ayudara a desabotonar su camisa, pero al percatarse de que avanzaba muy rápido, la interrumpió y dijo:
“Lo que me hacen hacer nada más para llevarme los sagrados alimentos a los labios”.
Descubierto del torso y bromeando ser Superman al abrir su camisa, el artista colocó su sentimiento en “Querida” uno de los temas más emblemáticos en toda su carrera.
Las canciones “Pero qué necesidad”, “Me nace del corazón” y “Se me olvidó otra vez” pusieron de pie a todos, y para finalizar la velada escogió el clásico “El Noa Noa” con el que nadie, en señal de satisfacción y cariño hacia su ídolo, paró de bailar y de cantar.
En el Auditorio Nacional, Juan Gabriel también se presentará los días 19, 20, 25, 26 y 27 de septiembre.