La “terrorista” apuñaló a un hombre israelí por la espalda en la parte superior del cuerpo y lo hirió levemente, indicó la portavoz de la policía Luba Samri. El hombre sacó su arma y disparó, hiriéndola de gravedad, dijo Samri.
Ambos fueron trasladados a un hospital.
El ataque se produjo cerca del lugar donde un palestino mató el sábado a puñaladas a un hombre israelí e hirió a su esposa y su hijo pequeño, indicó el canal 2 de la televisión israelí. El agresor atacó y mató luego a otro hombre israelí antes de ser abatido por la policía.
El martes por la noche se había levantado una medida sin precedentes que impedía a los palestinos no residentes en la Ciudad Vieja de Jerusalén acceder a la zona, dijo la vocera.
También se levantó otra medida que prohibía el acceso de hombres menores de 50 años al complejo donde se encuentra la mezquita de El Aksa. Israel ha impuesto esa norma en momentos de inestabilidad en el pasado, ya que la mayoría de los que lanzan piedras en el recinto son palestinos jóvenes.
El lugar, conocido como Explanada de las Mezquitas, ha estado en el centro de las últimas tensiones. Los musulmanes veneran el complejo situado sobre una colina por considerar que desde allí ascendió a los cielos el profeta Mahoma, mientras que los judíos creen que allí se alzaban dos templos judíos descritos en la Biblia.
En las últimas semanas se han registrado varios días de enfrentamientos en el lugar, ya que varios palestinos se atrincheraron dentro de la mezquita de El Aksa y arrojaron piedras, bombas incendiarias y fuegos artificiales a la policía.
Los disturbios se extendieron después a los barrios árabes de Jerusalén Este y Cisjordania.
Antes, las tropas israelíes tomaron medidas de las viviendas de cinco palestinos detenidos por la muerte de una pareja israelí en Cisjordania, indicó un pariente de uno de los detenidos, en un aparente preludio a su demolición.
Tropas israelíes registraron el miércoles cinco viviendas en la ciudad cisjordana de Nablus, dijo Ayman Masri, tío de uno de los detenidos. Otras cinco residencias fueron registradas también en otros lugares, indicó el oficial palestino Qadura Fares.
El ejército israelí no hizo comentarios en un primer momento.
Israel acusa a los detenidos de disparar y matar a una pareja delante de sus cuatro hijos, en un ataque en un vehículo la semana pasada que se produjo en medio de un repunte de la violencia.
Las autoridades israelíes derribaron el martes las casas familiares de dos milicianos palestinos que cometieron ataques mortales en Jerusalén el año pasado. Esta práctica pretende disuadir de nuevos ataques.