Intervienen tierras de fundador de las bandas paramilitares

BOGOTA, Colombia (AP) — Bienes de Vicente Castaño Gil, uno de los principales fundadores de las bandas paramilitares del país, fueron intervenidos con fines de extinción de dominio.

La policía informó el miércoles en un comunicado que se trata de propiedades que en el pasado pertenecieron a José Vicente Castaño Gil, quien hacia 1980 fundó junto a sus hermanos Fidel y Carlos las bandas paramilitares del país con el supuesto propósito de combatir los asesinatos, secuestros y extorsiones de la guerrilla.

El informe policial indicó que entre los municipios de San Pedro de Urabá (Antioquia) y Valencia (Córdoba) ubicaron 670 hectáreas que pertenecieron a Vicente Castaño y que figuraban a nombre de testaferros de su familia.

Según la entidad, esas 670 hectáreas, comprendidas en 21 predios, tienen un valor aproximado a los 2.730 millones de pesos (unos 932.000 dólares).

Una de las propiedades intervenidas fue la finca “La 35”, que en realidad era un campo de entrenamiento de paramilitares.

Los bienes afectados pasarán a manos del Fondo de Reparación para las Víctimas.

El rastro de Vicente Castaño, también un reconocido narcotraficante, se perdió hacia 2006. Las autoridades presumen que está muerto.

Su hermano mayor, Fidel Antonio, fue asesinado en 1994 al parecer por sus propios compañeros de las autodefensas.

El menor de los Castaño, Carlos, fue asesinado en 2004 por sus propios hombres. Varios testigos declararon a la Fiscalía que el asesinato fue ordenado por Vicente Castaño.

Los Castaño crearon las bandas paramilitares y se enfrascaron en una guerra a muerte con las guerrillas después de que en 1979 las FARC secuestraron a su padre, Jesús Castaño, quien murió en cautiverio. Nunca les entregaron su cadáver.

Los tres hermanos integraron a principios de los años 90 una organización ilegal conocida como los ‘Pepes’, o los ‘Perseguidos por Pablo Escobar’, el temido narcotraficante fundador del cartel de Medellín que en diciembre de 1993 fue abatido por la fuerza pública en Medellín. Aunque desde la ilegalidad, los ‘Pepes’ fueron vitales para cazar a Escobar.

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