Los presos en la ciudad tienen el derecho de solicitar que les lleven el ataúd de padres o hijos fallecidos al patio del penal para despedirse de sus seres queridos.
El vocero del sistema penitenciario de la capital, Emilio Castelazo, dijo que antes de que el féretro entrara a la prisión de Santa Marta Acatitla fue revisado por guardias que encontraron el teléfono móvil.
El portavoz dijo que se inició una investigación. Añadió que varios familiares acompañaban el ataúd.
Los teléfonos celulares están prohibidos en los penales porque los reos suelen utilizarlos para coordinar actividades criminales fuera de la prisión o para hacer llamadas de extorsión.