Más de ocho mil colegios electorales abrieron sus puertas en todo el país a las 07:00 horas locales (04:00 GMT) y tienen previsto cerrar a las 18:00 horas locales (15:00 GMT). Más de 21 millones de iraquíes pueden votar en las elecciones con el fin de elegir el nuevo Parlamento, que se espera traiga cambios a este país abatido por la violencia.
Más de nueve mil candidatos de 280 entidades políticas compiten por los 328 escaños en el Parlamento. El actual primer ministro, Nouri al-Maliki, ordenó cerrar el espacio aéreo y un toque de queda, después que los rebeldes del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL), amenazaron con interrumpir los comicios con ataques suicidas y coches bomba.
La elección es la primera desde que las tropas estadounidenses se retiraron en diciembre de 2011 y representa la prueba más grande de las fuerzas de seguridad locales.
La televisión estatal mostró cuando al-Maliki acudió a emitir su voto en Bagdad, la capital iraquí, la mañana de este miércoles. “Vamos a votar por el futuro de nuestros hijos… Hago un llamamiento a todos los iraquíes … para emitir su voto de manera valiente. Porque eso será un gran golpe en el rostro del terrorismo”, indicó.
El ISIL lanzó un triple ataque suicida en un mitin electoral la semana pasada, que dejó 37 personas muertas y 80 heridas. La violencia sectaria ha tenido este año un aumentó a niveles no vistos desde 2006 a 2007, un período en el que murieron decenas de miles de personas.