En noviembre de 2014 el entonces procurador general, Jesús Murillo Karam, presentó en una rueda de prensa las conclusiones a las que llegó la PGR sobre la desaparición de los 43 normalistas.
Murillo Karam aseguró que el motivo del ataque contra los estudiantes fue por una confusión del narcotráfico, es decir, había un pleito entre grupos delictivos y los normalistas fueron confundidos como miembros de un grupo rival. También se dijo que la policía entregó a los normalistas a un grupo de narcotráficanes.
Así mismo, el ex procurador afirmó que los cuerpos fueron quemados en el basurero de Cocula. Ambos hechos fueron descartados por los expertos.
Los expertos de la CIDH
El Grupo de Expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (GIEI) rebatió los conclusiones de la PGR. El domingo mediante una conferencia de prensa presentaron sus argumentos y conclusiones sobre el caso Ayotzinapa, de las cuales destcan:
– El experto en la materia de incendios, el Dr. José Torero dio a conocer los elementos para que los normalistas pudieran haber sido incinerados como lo afirmaron las autoridades mexicanas. Para quemar un cuerpo humano se neceistan 700 kg de madera mínimo, 310 kg de neumáticos, 310 kg de diésel y la duración del quemado debe ser de 12 horas.
Para lograr la quema de 43 cuerpos se deben utilizar 30, 100 kg de madera, 13, 330 kg de neumáticos, 13, 330 kg de diésel y la duración se calcula en 6o horas.
Además los expertos señalan que las condiciones para lograr tal incineración no favorece las supuestas circunstancias en que los normalistas fueron quemados, ya que las autoridades dijeron que fue al aire libre. Cabe mencionar que de acuerdo a varios testimonios presentados por GIEI, esa noche se registraron lluvias en la zona por lo que las condiciones para concretar un incendio de tal magnitud no favorecían.
– En el análisis de la investigación adelantada aparecen debilidades tanto en la investigación de los hechos, que debieron haberse complementado y profundizado, y en las diligencias realizadas por la PGJ, como en la investigación de la organización delictiva, su estructura, integrantes y actividades ilícitas. A continuación se describen estas debilidades y sus consecuencias para la investigación (Cita textual del documento presentado por GIEI, pp. 188).
– Por otra parte, diferentes testigos señalan la presencia de policía federal en el escenario del Palacio de Justicia en dos momentos diferentes y también de policía ministerial según los normalistas, otros testigos y policías municipales; de policía ministerial en el escenario de Juan N. Álvarez, según algunos policías ministeriales; y agentes de inteligencia del ejército en el escenario de calle Galeana (salida a Juan N. Álvarez) y del Palacio de Justicia según reportes y declaraciones de miembros del ejército; de policía ministerial en el escenario de persecución a normalistas en la Colonia Pajaritos, según el testimonio de dichos sobrevivientes (Cita textual, pp 320).
– Por otra parte, las contradicciones en dichas versiones sobre los hechos, por parte de los acusados de ser parte de Guerreros Unidos, y haber llevado a cabo el asesinato y desaparición, muestran las inconsistencias en dicha versión de lo sucedido posteriormente y su desconexión respecto lo niveles de decisión que aparecen en la primera parte de los hechos. (Cita textual, pp. 322).