México, 2 Dic (Notimex).- El Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), a través de su directora general María Cristina García Cepeda, entregó hoy el “Premio a la Excelencia Académica” 2015 a la maestra e investigadora Anadel Lynton Snyder.
Asimismo, Alma Laura Pérez Monter, de la Escuela de Artesanías, así como María de las Mercedes Gómez Benet y Ana Eugenia González Gallo, ambas del Conservatorio Nacional de Música, obtuvieron los dos primeros lugares y la mención honorífica, respectivamente, del “Premio al Desempeño Académico en Docencia”.
En un comunicado, el INBA dio a conocer que el “Premio al Desempeño Académico en Investigación” fue concedido a Ana María Garduño Ortega del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap).
Alberto Argüello Grunstein, también de ese centro de investigación, obtuvo mención honorífica, mientras Judith Galicia Velasco, del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información Teatral Rodolfo Usigli (Citru), fue reconocida con el segundo lugar en esa categoría.
La Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes fue la sede elegida para llevar a cabo la premiación, donde la titular del INBA afirmó que Anadel Lynton “es sin duda, una de nuestras colaboradores más queridas, una mujer para quien la danza ha sido la vida misma”.
Destacó que los reconocimientos otorgados por el INBA son un homenaje a los formadores de los artistas del mañana, y cada uno de los premios es testimonio de una comunidad apasionada por su vocación.
La investigadora Anadel Lynton expresó que siempre ha sido medio rebelde y en vez de dedicarse de tiempo completo a bailar en el Ballet Nacional, se mantuvo con becas de la SEP para estudiar Antropología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia”.
Señaló que en el Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de la Danza José Limón (Cenidi-Danza) pudo desarrollar las bases de sus talleres “Danzado en comunidad” y “Movimiento-Expresión-Comunicación”.
Manifestó que “es necesario fortalecer el impulso a la danza como un arte crítico, reflexivo y definitivamente contestatario, que se resiste siempre a convertirse en mercancía”.
Finalmente, Patricia Camacho, como representante del comité de evaluación, afirmó que el Premio a la Excelencia Académica recayó en Lynton Snyder y los otros galardonados tras una selección sumamente rigurosa.