Tras 12 años de la administración Bloomberg, los habitantes de Nueva York hoy votarán por el nuevo alcalde. El favorito para suceder a Michael Bloomberg, es uno de los hombres más acaudalados de Estados Unidos, el demócrata Bill de Blasio, quien tiene una ventaja en las encuestas de alrededor de 40 puntos por encima de su rival, el republicano Joe Lhota.
De Blasio es el actual defensor público de la ciudad de Nueva York, un puesto de elección popular que sirve como supervisor de las tareas de gobierno, y fue asimismo el jefe de la campaña de Hillary Clinton para el Senado de Estados Unidos.
Mientras Lhota se desempeñó como alcalde alterno durante el gobierno de Rudolph Giuliani. En una ciudad demócrata y liberal, sin embargo, el actual candidato republicano tiene pocas esperanzas luego que los habitantes parecen ya cansados de Bloomberg.
El alcalde ha sido acusado de insensible frente a los problemas sociales de la ciudad, tanto al implementar su polémica política de “Detención y cateo”, que afecta de manera desproporcionada a las minorías, como por el creciente número de personas sin hogar en la ciudad, por ejemplo.
De Blasio, casado con una mujer afroestadunidense, con quien tiene dos hijos, ha proyectado en cambio una imagen liberal y progresista, y ha prometido reducir la creciente brecha que existe en Nueva York entre los ricos y los pobres.
El demócrata ha mantenido su enorme ventaja desde que hace unas semanas iniciaran las campañas y desde que ganara en las primarias a la precandidata favorita del partido, Christine Quinn, líder del Consejo Municipal de la ciudad.
Una serie de debates televisivos transmitidos en las semanas recientes no parecieron alterar las preferencias, y si acaso sólo afianzaron a De Blasio, quien parecía más confiado y articulado que el republicano Lhota.