El Hospital Británico indicó en un comunicado que María Elena Bergoglio, de 66 años de edad, había ingresado el 20 de diciembre pasado, “procedente de un centro de rehabilitación, por un cuadro compatible con infección urinaria”.
Precisó que la hermana del Papa Francisco siempre “fue atendida en una sala general” del centro asistencial, donde se mantuvo en una condición clínica “estable”.
María Elena Bergoglio ya había sido internada, en septiembre pasado, por un cuadro hipertensivo vinculado a un alza en su nivel de glucosa.