Autoridades de los ministerios de Educación, Salud y del Trabajo se reunieron con directivos de la entidad empresarial Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa), a seis meses de que firmaron el Acuerdo Nacional para el Desarrollo Humano.
El presidente de Fundesa, Felipe Bosch, afirmó que se tienen avances al igual que desafíos en el objetivo de reducir el índice de pobreza de más de 50 por ciento a 35 por ciento de la población en 2021. Reiteró que con la voluntad y el compromiso del gobierno y de los empresarios organizados se puede “alcanzar el sueño” de combatir la pobreza que afecta a más de la mitad de los guatemaltecos (15 millones de habitantes).
La reunión fue programada para dar seguimiento al Acuerdo Nacional de Desarrollo Humano, suscrito en octubre de 2013 por el gobierno, Fundesa y 14 partidos políticos con registro, que contiene una serie de acciones para reducir la desigualdad de oportunidades. Además de luchar contra flagelos derivados de la pobreza estructural en Guatemala, como la desnutrición crónica que afecta a 49.8 por ciento de los niños de entre cero y cinco años de edad, y la baja calidad educativa.
También se evaluaron las acciones para avanzar en problemas como la falta de capacitación técnica, que abarca solo a 5.0 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), la cual asciende a 6.2 millones de personas.
Representantes del gobierno expusieron que con el Pacto Hambre Cero, una iniciativa prioritaria del presidente Otto Pérez Molina, se avanza en el objetivo de combatir el hambre y la desnutrición. El objetivo del Acuerdo entre empresarios y gobierno es reducir en 2012 la desnutrición crónica a un índice de 29 por ciento de los menores de cinco años.
La ministra de Educación, Cynthia del Águila, aseveró que se han instrumentado programas para abatir los índices de “fracaso” o deserción escolar que se registra sobre todo en el primer grado de educación primaria. Señaló que se busca reorganizar el presupuesto para la contratación de 30 mil maestros que se requieren para ampliar la cobertura de educación primaria.
El ministro del Trabajo, Carlos Contreras, dijo a su vez que las autoridades se esfuerzan por generar condiciones para “insertar en los procesos de producción” a mayores grupos de la PEA, y que se enfrenta el fenómeno de la informalidad (por cada empleo formal hay cinco informales).
Indicó que el “desempleo abierto” se ubica en 3.0 por ciento y que la población más afectada por la falta de oportunidades y de desarrollo es la que habita en las áreas rurales, donde es imprescindible generar fuentes de empleo.
Los especialistas en temas económicos de Fundesa establecieron que el índice de crecimiento de Guatemala de 3.5 en promedio es insuficiente, ante un incremento de la población de 2.5 por ciento, por lo cual persisten las condiciones de pobreza.