En un comunicado, la agencia indicó que los menores, sobre los que no aclaró el género, tenían entre 13 y 17 años de edad, y que algunos de ellos eran estudiantes de secundaria y niños que habían sido reportados como desaparecidos por sus familias.
Asimismo, otras acciones resultaron en el rescate de víctimas internacionales de tráfico humano, aunque la FBI no especificó las nacionalidades.
Informó además que en el operativo arrestó a más de 45 proxenetas y sus asociados, algunos de los cuales declararon haber viajado al área donde se celebró la final del futbol americano con el propósito específico de prostituir mujeres y niños.
Eventos especiales de alto perfil, que atraen grandes multitudes, se han convertido en una lucrativa oportunidad para los negocios de prostitución infantil, dijo Ron Hosko, director asistente de la División de Investigación Criminal de la FBI.
En el transcurso de la operación, la agencia ofreció asistencia, que incluyó desde ropa y alimentos hasta servicios de salud y refugios, a 70 mujeres y niños víctimas del tráfico.
El operativo fue concretado gracias a la cooperación entre la FBI y más de 50 dependencias relacionadas con la seguridad, destacó el comunicado.
George Venizelos, director asistente de la FBI en Nueva York, manifestó que la explotación sexual de niños es una epidemia, que se está expandiendo rápidamente por toda la nación, y que no sólo esclaviza menores sino que facilita la comisión de otros delitos por parte de proxenetas.
Asentó además que la naturaleza migratoria de estos crímenes hace que sea esencial para las agencias de seguridad cooperar para atacar este creciente fenómeno.