El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas de Colombia (FARC) iniciaron desde el 1 de marzo pasado, el desarme de todas las organizaciones de esta índole, siendo este totalmente voluntario, contando así como la primera fase del acuerdo de paz que fue firmado en Bogotá el año pasado.
El proceso debía terminar en la última semana de mayo, pero gracias a problemas en la logística, la fecha de finalización se ha ido postergando con el tiempo, teniendo como fecha final el 27 de junio del presente.
El proceso se ha cumplido a cabalidad en los 26 puntos de concentración que han sido preestablecidos para las FARC, el cual estuvo dividido en tres etapas y respaldado en todo momento por una misión de las Naciones Unidas (ONU).
Hay que mencionar que el pasado 14 de junio, la ONU había manifestado que solo se habían recibido el 40% de las armas que estaban estimadas, cuando en ese día se debía haber recibido el 60%, aunque más tarde se habría de completar este proceso.
Ante la situación antes mencionada, y de por medio el Oslo Forum, tanto la canciller colombiana, María Ángela Holguín, así como el principal líder de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias “Timoleón Jiménez” o “Timochenko”, han reconocido los retrasos, aunque sin poner en duda el compromiso por parte de ambas partes de que se realice en su totalidad el desarme anunciado desde meses atrás.
El acto de cierre de este desarme, que significa el regreso de los integrantes de las fuerzas armadas a una vida civil, será realizada a las afueras del municipio de Mesetas, en el departamento de Meta, siendo este uno de los 26 campamentos en donde se encuentran alojados miembros de las FARC.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se encontrará presente en el evento y dará fe a la entrega de armas que, en teoría y de resultar todo como lo planeado por parte de las autoridades, estaría finalizando de manera exitosa.