Por Rubén Barrera. Corresponsal
Washington, 30 Nov (Notimex).- La inclusión del yuan en la canasta de divisas que respaldan la unidad monetaria de reserva del Fondo Monetario Internacional (FMI) tendrá efectos favorables en el sistema financiero internacional y China, aunque serán a largo plazo.
La diversificación en materia internacional siempre es buena, dijo Isaac Cohen, exdirector de la oficina en Washington de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Hizo ver que para los bancos centrales, que mantienen sus reservas invertidas, esto les abre la posibilidad de tener más diversificada su canasta.
El directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) dijo este lunes que la medida facilitará el comercio y la inversión con China, la segunda economía del mundo, eliminando de paso los temores sobre la confiabilidad de su sistema financiero.
Para Cohen, los frutos de esta esperada decisión están aún por manifestarse por considerar que al yuan o renminbi le falta aún por cumplir varios requisitos, y de ahí el hecho de que el anuncio de este lunes será implementado hasta octubre del 2016.
Este lunes el Directorio Ejecutivo del FMI determinó incluir al yuan o renminbi en la canasta de divisas que respaldan los Derechos Especiales de Giro (SDR, por sus siglas en inglés), la unidad monetaria de reserva para sus operaciones crediticias.
El valor de los SDR se basa en las monedas que integran esta canasta, la cual es revisada cada cinco años por el directorio con el propósito de asegurarse de que esté al día con el desarrollo de los mercados financieros internacionales.
El directorio determinó que la moneda china cumple los cinco criterios actuales establecidos para ser incluida en esa canasta junto al dólar estadounidense, el euro, el yen japonés y la libra esterlina.
Destacó la determinación de que la moneda china es hoy utilizada de manera amplia a través del mundo para realizar transacciones financieras, entre ellas el pago de importaciones, de deuda y que tiene amplio uso en los mercados cambiarios.
Sin embargo para Cohen, esto es algo en que la moneda china aún se queda corta.
Yo no creo que sea tan fácil convertir dólares a yuanes o yuanes a dólares o a libras esterlinas, y eso influye en los mercados de capital. Creo que la convertibilidad del yuan todavía no es total, apuntó Cohen en entrevista.
Dada esta limitante, dijo, resulta prematuro asegurar que la moneda china pase a convertirse de inmediato en moneda de reserva.
Creo que va a tomar algún tiempo antes de que la moneda vaya a formar parte de la canasta de moneda donde los bancos centrales invierten su dinero, consideró.
Cohen estimó que entre 70 y 80 por ciento de las transacciones internacionales del comercio mundial se liquidan en dólares estadunidenses, lo cual coloca al yuan en una posición marginal.
Una moneda se gana el espacio con confianza, con credibilidad y con la intensidad con la cual se utiliza, y creo que habrá que esperar antes que el uso del yuan sea generalizado, precisó.
Dijo que aunque la libre esterlina ha perdido su participación relativa en las transacciones económicas internacionales respecto de la posición medio siglo atrás, todavía muchas operaciones usan la moneda inglesa debido a la confianza en ese mercado.
No se puede crear una moneda de reserva por decreto. Esto es algo que va a tomar tiempo y lo iremos viendo de manera gradual, expuso.