En declaraciones divulgadas por el medio oficial boliviano, Evo Morales dijo que el “imperio” busca desestabilizar a la democracia venezolana ante el éxito de la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), realizada en enero pasado en Cuba.
“Los presidentes y gobiernos de la Celac decidimos declarar (América Latina y el Caribe) una zona de paz y después viene esta conspiración, por supuesto como una venganza del gobierno de Estados Unidos”, señaló el mandatario boliviano.
A juicio del jefe de Estado, la postura de sectores de la oposición venezolana de pedir la renuncia del presidente Nicolás Maduro es una “abierta conspiración a la democracia”. “El imperio, usando las oligarquías de los países de América Latina, a veces usando sus propios instrumentos como la embajada y Usaid, invierten para acabar con un presidente de un gobierno antiimperialista”, sentenció.
Aseguró, en ese sentido, que el gobierno de Washington “busca una dominación política para un saqueo económico, esa es la triste historia de toda América Latina y el Caribe”.
Recordó que la historia latinoamericana “se basa en que el imperio busca conflictos y cuando no encuentran conflictos buscan como acabar con líderes políticos o dirigentes sindicales antiimperialistas mediante masacres, torturas y confinamientos”.
“En los últimos años ha terminado esta clase de acabar con la vida porque los pueblos defienden, democráticamente, revoluciones con la conciencia de los pueblos y la participación para recuperar los recursos naturales”, enfatizó Morales.
Denunció que Estados Unidos financia grupos violentos y terroristas para “enfrentar a los pueblos” y justificar una intervención de Cascos Azules y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). “Esa es la nueva estrategia política intervencionista del gobierno de Estados Unidos”, insistió Morales y subrayó que ese país “usa grupos de venezolanos para enfrentar y posibilitar una intervención de cascos azules como la OTAN”.
“Eso busca Estados Unidos y por eso es importante hacer una profunda conciencia no solamente en Venezuela, sino en toda América Latina y el Caribe, porque estamos en procesos de liberación”, concluyó el presidente boliviano.