Barack Obama se ve ha visto presionado a adoptar acciones audaces en momentos en que las iniciativas para reformar las leyes de inmigración están estancadas en el Congreso. Los defensores de los inmigrantes han declarado que incluso tales acciones no van lo suficientemente lejos.
El secretario de seguridad nacional, Jeh Johnson, quien realiza una revisión de las políticas federales de deportación, dijo el jueves que el programa Comunidades Seguras “se ha vuelto muy controversial” y necesita “modificaciones”.
El programa permite a funcionarios del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) pedir a las policías municipales y condales que detengan a personas que han sido fichadas y cuyas huellas dactilares son las mismas de personas que están en la base de datos federal por infracciones de inmigración. El ICE entonces decide si los deporta.
Eso ha llevado a quejas de que están deportando a personas por infracciones de inmigración sin ser declaradas culpables de ningún delito, o sólo de delitos menores. Algunas policías municipales y condales también se quejan de que la gente teme interactuar con los agentes de la ley porque temen ser deportados. A raíz de recientes fallos judiciales que crean dudas sobre el programa, varios gobiernos locales han anunciado planes de negarse a cumplir las solicitudes del ICE de retener a fichados.
Johnson ofreció pocos detalles en comentarios en el programa “NewsHour”, de la cadena de televisión pública PBS, pero dijo que pudiera modificar el programa para centrarse en personas que hayan sido declaradas culpables de algún delito, no sólo arrestadas o fichadas.
“En mi opinión, Comunidades Seguras debe ser una forma eficiente de trabajar con las policías municipales y condales para cumplir las prioridades de deportación que tenemos, que son las personas declaradas culpables de algo”, dijo.
Los cambios al programa Comunidades Seguras y otras políticas policiales serían una respuesta a las exigencias de defensores de los inmigrantes, que han presionado al presidente Barack Obama para que tome medidas con el fin de reducir el alto ritmo de deportaciones durante su presidencia, pero muchos defensores de los inmigrantes han presionado para eliminar completamente Comunidades Seguras, pero incluso eso no cumpliría las exigencias de medidas integrales que los defensores demandan para permitir que algunos de los 11,5 millones de personas que viven en el país sin autorización se puedan quedar.
“Comunidades seguras ha causado un daño irreparable a las comunidades de inmigrantes y aunque cualquier intento de separar innecesariamente a las familias es algo positivo, un paso como este es sencillamente muy poco”, dijo Kamal Essaheb, abogado del National Immigration Law Center.
Hace dos años el presidente Barack Obama prorrogó el permiso de trabajo y protegió de la deportación a algunos inmigrantes que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños. Johnson dijo que sigue revisando la posibilidad de ampliar el programa, pero se mostró cauteloso, al igual que el presidente.
“Yo diría que tenemos que tener cuidado de no adelantarnos al Congreso en ciertas cosas”, dijo Johnson. “Ellos son los legisladores. Cualquier cosa que hagamos en el poder ejecutivo, tenemos que hacerlo dentro de los límites de la ley”.
La revisión de las deportaciones ocurre en momentos que las propuestas de una reforma integral de las leyes de inmigración están atascadas en la Cámara de Representantes 11 meses después de su aprobación en el Senado.