Reiteramos nuestro llamado al gobierno cubano para que deje en libertad a Alan Gross inmediatamente. Su detención permanece como un impedimento para una relación más constructiva entre Estados Unidos y Cuba, indicó la portavoz del Departamento de Estado, Jennifer Psaki.
Las declaraciones de Psaki se dieron luego que el abogado de Gross señaló este miércoles a la televisora MSNBC que el próximo 2 de mayo, día en que su cliente llega a los 65 años de edad, sería el último cumpleaños que éste pasa en Cuba, ya que saldría del país vivo o muerto.
Obviamente comentarios como esos, por supuesto son de gran preocupación para nosotros, su salud, seguridad y bienestar está en nuestra mente todos los días por eso trabajamos duro para asegurar su retorno, agregó.
La funcionaria añadió que el encarcelamiento de Gross es uno de los casos en los que Estados Unidos ha estado consistentemente preocupado en extremo.
Recordó que el presidente Barack Obama ha comprometido a otros líderes en el mundo y figuras internacionales para que usen su influencia con Cuba para promover la liberación del estadounidense.
El secretario de Estado, John Kerry, y otros funcionarios han presentado el caso de Gross a sus interlocutores que tienen relación con Cuba.