El secretario del Tesoro, Jack Lew, afirmó que la propuesta para respaldar la reforma fue incluida en el presupuesto de gasto que el presidente Obama envió al Congreso en marzo pasado. Nosotros entendemos que la membresía del FMI incluye beneficios y responsabilidades y estamos trabajando para cumplir nuestra crítica responsabilidad con la implementación de las reformas de cuotas y gobierno del 2010, indicó el funcionario.
Al participar en una reunión del Comité Financiero del FMI, Lew reiteró la decepción de su gobierno por la negativa de los republicanos para incluir la iniciativa sobre la reforma del fondo en el paquete de asistencia a Ucrania.
Los republicanos han bloqueado todo intento de la Casa Blanca para aprobar esta iniciativa, exigiendo cambios en la supervisión del Servicio Interna de Rentas (IRS) sobre grupos de acción política exentos de impuestos. Lew dijo que pese a este revés la administración Barack Obama se mantiene totalmente comprometida para aprobar la legislación del FMI y actualizar el gobierno del fondo de manera que refleja la economía global dijo.
Aseguró que pese a estos fracasos, existe un importante apoyo bipartidista para que se tome acción. Hemos incluido la legislación en la propuesta de presupuesto de 2015 y vamos a continuar trabajando activamente con el Congreso para promulgarla este año, dijo.
El Grupo de los 24 (G-24), que reúne a países en desarrollo y emergentes, expresó el jueves su decepción por el estancamiento de este proceso, aunque sin aludir de manera directa al congreso estadounidense.
Estamos profundamente decepcionados de que la agenda de reformas de cuotas y gobierno en el FMI no ha entrado en efecto debido a que no ha sido ratificada por sus principales accionistas, señaló el G-24 en un comunicado al termino de su reunión ministerial en Washington.
El jueves, la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, afirmó que la institución mantendrá de momento sus esfuerzos para trabajar con Estados Unidos para sacar adelante la reforma. Espero que podamos agotar todas las oportunidades bajo el plan A dijo Lagarde aludiendo el proceso actual, detenido debido a la negativa del Congreso estadounidense.
El bloqueo ha generado malestar de países como China y Rusia, que insisten que la reforma no puede esperar más y que es momento de que el proceso continúe sin el apoyo de Estados Unidos, que tiene poder de veto en la Junta de Gobierno del FMI.
Cuestionada en rueda de prensa sobre la existencia de un plan alterno frente a este bloqueo, Lagarde dijo que pasar a un plan B sólo será factible hasta que tengamos certeza total y una decepción masiva de que el plan A este definitivamente muerto. Yo no estoy preparada para declarar eso en este momento, precisó Lagarde.