Por Adela Mac Swiney González. Corresponsal
Madrid, 3 Dic (Notimex).- El rey Felipe VI inauguró hoy aquí la exposición Bernardo de Gálvez y la presencia de España en México y Estados Unidos, sobre uno de los militares más destacados de la Ilustración y quien llegó a ser Virrey de la Nueva España.
La muestra está organizada por el Instituto de Historia y Cultura Militar del Ejército de Tierra y la Casa de América, con el patrocinio de Iberdrola, sobre este personaje que comenzó la construcción del Castillo de Chapultepec en México.
Destaca la forma como se desarrollaron las campañas más importantes a través de más de un centenar de obras artísticas, libros, archivos, dioramas, recreaciones y piezas de gran valor histórico.
A lo largo del recorrido, que incluye piezas diseñadas expresamente para la muestra y hasta una trinchera fielmente recreada de la época, se puede observar, además, una iluminación vanguardista en una selección de obras con tecnología LED.
El capitán Germán Segura García, ayudante del comisario de la muestra, José Manuel Guerrero Acosta, explicó a Notimex los detalles de la exposición, que está dividida en cuatro espacios, en memoria de la figura de Bernardo de Gálvez para quien México fue muy importante.
Bernardo de Gálvez nació en Macharaviaya, Málaga, sur español, en 1746. Fue un militar y político español, héroe de Pensacola, ciudadano honorario de los Estados Unidos de América, falleció a los 40 años de edad en Tacubaya y sus restos reposan en la Iglesia de San Fernando, en la Ciudad de México.
Para Segura García México es el lugar donde Gálvez se forja como soldado, luego de que llegó por primera vez a Chihuahua, una frontera conflictiva, donde apenas se están creando los presidios, cerca del Río Colorado, y allí se forjó militarmente.
Él está al frente de diversas guerras en las que se foguea contra los apaches, llega con ideas ilustradas y cree que el problema de los apaches es que no se entienden las civilizaciones, y que hay que intentar adaptarse, agregó.
Aunque Gálvez estuvo como Virrey de la Nueva España cerca de un año, en ese tiempo -aseguró Segura García- dejó muy buen sabor de boca. Él no conocía aún el México grande, porque México era seguramente el virreynato más esplendoroso que había en la monarquía española y era una ciudad muy cosmopolita.
Creó el Castillo de Chapultepec y realizó una serie de reformas que para el poco tiempo que estuvo dieron muy buen resultado, expuso.
La muestra se divide en cuatro espacios, que albergan más de un centenar de piezas de gran valor histórico, artístico y documental.
La primera de las salas está dedicada a la España de Bernardo Gálvez, una gran potencia mundial, poseedora de inmensos territorios en América.
Diferentes videos y documentos muestran cómo era la vida en la corte y cuál era la posición de España en el escenario internacional.
En un segundo y tercer espacio se documenta la huella de España en México y Estados Unidos, gracias a piezas como el modelo original de la escultura de Gálvez a caballo, realizada por Juan de Ávalos y que el rey emérito Juan Carlos regaló a Estados Unidos en 1976.
También se encuentran ahí mapas del Reino de Nuevo México, que datan de 1779.
Un cuarto bloque está centrado en documentar las principales campañas en las que participó el coronel.
La exposición ofrece reproducciones de los uniformes que vistió, documentación sobre los honores que recibió por parte del rey o los planos de la toma de Pensacola, que muestran la estrategia de aquella histórica batalla.
Para acceder al último espacio, el público tiene que atravesar la recreación de una trinchera de tamaño real similar a la utilizada en ese asedio.
Una serie de objetos relacionados con el ámbito bélico muestra la actuación militar de España en el Golfo de México entre 1780 y 1781. En esta última sala se expone por primera vez el óleo realizado por Augusto Ferrer Dalmau para ilustrar la Batalla de Pensacola.