El Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y Estratégicos organizó este miércoles el debate Movilización yihadista en Siria e Irak: desafíos para España, en el que se analizó la situación para España por este fenómeno.
En el evento realizado en la Casa Árabe en Madrid, el investigador principal de Terrorismo del RIE, Fernando Reinares, sostuvo que la hipótesis por la que España tiene menor riesgo que otros países europeos, está en las características de su comunidad musulmana.
Señaló que en España hay una inmigración económica musulmana de primera generación, mientras que en Francia, Alemania, Reino Unido y Bélgica es de segunda o tercera generación, y que sufre crisis de identidad, que no se sienten ni del país de origen de su familia ni del país de acogida. Hay una integración social, pero no hay asimilación cultural, son dos cosas diferentes, manifestó al recordar que esa crisis de identidad influye en la radicalización islámica.
Comentó que en España hay dos ciudades, Ceuta y Melilla, ambas en la costa norte de África y fronterizas con Marruecos, donde se han desarticulado varios grupos de captación de yihadistas para enviarlos a Siria o Irak.
Reinares recordó que siete de cada 10 detenidos en esas operaciones es de ciudadanía española, dado que en esos lugares sí hay una segunda generación de comunidad musulmana y tienen la cercanía con el salafismo presente en Marruecos.
El director de Terrorismo Internacional del Centro Nacional de Coordinación Antiterrorista del gobierno español, Juan Carlos Marín, afirmó que en este momento se cree que hay unos 12 mil combatientes extranjeros en Siria e Irak, integrados a las filas del Estado Islámico.
Expuso que de esa cifra hay por lo bajito unos mil 200 combatientes de países de Europa occidental, de forma destacada de Francia, Reino Unido, Alemania, Bélgica y Holanda, aunque hay presencia de ciudadanos procedentes de todos los países del continente.
Marín recalcó que de España se ha detectado estos años a unos 60 combatientes, la mayoría de Ceuta y Melilla, de los que ya algunos murieron en combate o atentados suicidas, por lo que actualmente habría de 30 a 35 presentes. Indicó que el EI es una amenaza y preocupa, y si bien se cree que en este momento no tiene capacidad para actuar en España, a medio plazo eso podría cambiar.
Refirió que una parte de la amenaza está en los retornados, los que tendrían una influencia radical en su comunidad, capacidad para captar combatientes, familiar sus viajes, y capacidad para atentar en España.
El director general del Instituto de Estudios Estratégicos, el general Miguel Ángel Ballesteros, subrayó que el EI es una amenaza para España por los retornados, pero a largo plazo el territorio español (la reclamación de la antigua Al Andalus) también justificaría su yihad defensiva.
Recordó que una amenaza está en el norte de África, con la escisión de Al Qaeda del Magreb Islámico que se convirtió en Soldados del Califato, que ya juraron lealtad al califa Ibrahim (líder espiritual del EI) que ejecutó a un turista francés recientemente. Puntualizó que en ese nuevo grupo hay tunecinos y eso vincula con que de tres mil ciudadanos que se estiman han ido de combatientes a Siria e Irak, unos mil ya han retornado.
Consideró que la razón por la que Al Qaeda y el EI se han desmarcado, es porque este nuevo ejército no solo se asienta y controlas los territorios que ataca, sino que infunde el terror no sólo a los occidentales, sino entre la población de allí, musulmanes, para controlarlos.
Ballesteros apuntó que el crecimiento de las filas de combatientes del Estado Islámico se debe no solo a los extranjeros que han llegado, sino a que reclutan en los territorios ocupados, lo mismo que han asaltado bancos y cuentan con unos mil millones de dólares y se han apropiado también de petróleo (en Irak).
En este evento, la responsable del área de terrorismo de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Dolores Delgado, explicó de reforzar la legislación de procedimientos penales, de justicia universal en España, así como la cooperación internacional para actuar con mayor margen ante el yihadismo.
Por su parte, el subdirector general de Asuntos de Terrorismo del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, Francisco de Miguel, dijo que el consenso internacional es, además de las acciones militares contra el EI, luchar contra la radicalización dentro de los países.
Asimismo, mencionó que se pide evitar el reclutamiento y reforzar el uso de medios de comunicación en la materia, y promover los principios de buen gobierno en países que han sufrido conflictos por el yihadismo como Siria e Irak.