CHICAGO (AP) El equipo responsable del museo de arte y cine de George Lucas publicó el jueves varias recreaciones artísticas mostrando el aspecto final del proyecto. En las imágenes se ve más espacio verde en torno al museo de Chicago pero no cambios radicales al curvilíneo y futurista edificio, que ha abierto un encendido debate en una ciudad que protege la costa de su lago Michigan con devoción casi religiosa.
Las imágenes que se presentarán la semana que viene ante el consejo municipal muestran que los diseñadores han reducido de forma significativa el edificio situado junto al lago, aunque mantienen la estructura similar a una duna, con una plataforma de observación similar a un disco flotante y a la que algunos han comparado con el personaje Jabba el Hutt.
Los defensores de lo que será el Museo Lucas de Arte Narrativo, entre los que está el alcalde, Rahm Emanuel, han dicho que el diseño es fiel a la historia de Chicago de audaces conceptos arquitectónicos y a sus esfuerzos por mantener la orilla del lago abierta, accesible y verde.
“Actualmente es un gran aparcamiento de asfalto que no es muy hospitalario, no es muy verde”, señaló el presidente del museo, Don Bacigalupi, del lugar situado al sur de Soldier Field, la casa de los Bears de Chicago. “Así que sustituir eso un museo, que es tanto un servicio como una atracción y una inspiración educativa, además de este nuevo espacio de parque muy verde… ése es en realidad nuestro objetivo”.
El complejo de casi 7 hectáreas (17 acres) eliminará el aparcamiento y añadirá 1,8 hectáreas (4,5 acres) de nuevas zonas verdes.
Un grupo comprometido con conservar el espacio abierto, especialmente en torno al lago Michigan, ha disputado la ubicación del museo, temiendo que abra camino a más construcciones en el valioso anillo de terreno público y abierto. En una demanda que está ahora ante un tribunal federal, el grupo afirma que la ciudad no tiene autoridad para entregar la tierra debido a un principio legal conocido como la doctrina del fideicomiso público, que requiere que el estado garantice la conservación y accesibilidad de espacios abiertos.
Las revisiones de diseño presentadas el jueves no eran un intento de tranquilizar a las voces críticas. Los cambios en el exterior se debían más bien a la nueva planificación del espacio interior. El edificio original se redujo de 37.000 a 28.000 metros cuadrados (de 400.000 a 300.000 pies cuadrados), lo que permitió dar más espacio al parque.
Ese espacio incluirá una “pradera de eventos” y abarca árboles y plantas nativas para atraer aves y otros animales, así como un sistema de estanques diseñado para filtrar las precipitaciones de tormentas.
Sus diseñadoras, las arquitectas Jeanne Gang y Kate Orff, dijeron que querían que el espacio funcionara como “infraestructura verde” además de ofrecer un inspirador umbral al museo que se alza en la distancia.
El diseño es prácticamente definitivo, aunque podrían realizarse ajustes menores. Se espera que la construcción comience en marzo y dure hasta 2018.
El edificio incluye una plataforma de observatorio en la azotea accesible sin coste a través de una rampa que sube en espiral por el interior de la estructura cónica del edificio.
Delante, una plaza al aire libre sube en una suave cuesta hacia el edificio.
“Recuerda al paisaje de dunas que había allí ante el lago hace mucho tiempo”, dijo la arquitecta Ma Yansong. “Así que es una arquitectura muy orgánica”.
El museo mostrará arte popular recopilado por Lucas desde la universidad, incluyendo ilustraciones de Norman Rockwell, Maxfield Parrish y N.C. Wyeth, así como obras de la firma de efectos visuales de Lucas, Industrial Light and Magic.
También incluirá arte de medios digitales y de la industria del cine, como material de utilería, disfraces, escenarios y story boards. Tres auditorios ofrecerán películas, conferencias y talleres. Y hay una biblioteca educativa.
El objetivo es destacar el arte que cuenta una historia. La colección reunirá a los aficionados a “La Guerra de las Galaxias” e “Indiana Jones” con aficionados al arte, señaló Bacigalupi.