Ben Neuman, virólogo en la Universidad de Reading, dijo que el caso de Cafferkey parece ser inusual a causa de la terca persistencia del virus de ébola en su cuerpo. En un caso similar detectado en un médico estadounidense se halló virus de ébola en su ojo izquierdo meses después de su recuperación.
Cafferkey fue trasladada por aire el viernes desde Escocia, donde vive, a Londres.
Las autoridades dijeron que el riesgo de que Cafferkey haya transmitido el virus es bajo, pero funcionarios de salud en Escocia monitorean a personas con quienes estuvo en contacto cercano. El ébola se transmite por contacto directo con sangre u otros fluidos corporales.
A Cafferkey se le diagnosticó ébola en diciembre tras regresar de Sierra Leona. Fue tratada en el Royal Free durante varias semanas y dada de alta en enero.
Cafferkey fue honrada en los premios Pride of Britain en Londres el mes pasado y se reunió con la esposa del primer ministro David Cameron, Samantha, en la residencia oficial del número 10 de la calle Downing.
El primer ministro dijo en Twitter que le deseaba a Cafferkey “una recuperación pronta”.
Desde el estallido del brote de ébola en Guinea el año pasado más de 11.200 personas han muerto por la enfermedad en África occidental.
Los expertos dicen que existe evidencia creciente de que los problemas mentales y físicos en los sobrevivientes de ébola pueden durar años después de que el virus ha salido del torrente sanguíneo. Hay miles de sobrevivientes de la enfermedad en África occidental que todavía sufren secuelas y muchos de ellos no tienen acceso a tratamiento.