Un trabajador de mantenimiento descubrió el viernes al animal, que tiene aproximadamente 30 centímetros (un pie) de largo, dijo el domingo el portavoz de la policía de Chicago, José Estrada.
Un agente capturó al reptil cubriéndolo con un bote de basura.
“No sabemos de dónde vino ni desde cuándo vivía en el aeropuerto”, dijo Estrada. “Se trata de esos incidentes fortuitos”, agregó.
La Sociedad Herpetológica de Chicago cuida ahora del animal.
“Estaba en muy mal estado”, dijo Jason Hood, presidente del grupo. “Intentamos ponerlo saludable y encontrarle lugar”, agregó.
Afirmó que el animal podría ser enviado a una granja de caimanes fuera del estado una vez que las autoridades autoricen a la organización darlo de alta.
Nadie resultó herido.