“Si la situación continúa siendo la misma de los últimos días en ciertas ciudades, donde ha habido varios incidentes muy violentos, con edificios importantes incendiados y gente asesinada en las calles, obviamente es muy difícil que se celebren elecciones“, afirmó en rueda de prensa en Ginebra el portavoz del ACNUDH, Rupert Colville. “Las elecciones, afirmó Colville, siguen siendo la mejor oportunidad que tiene Ucrania para iniciar el proceso de reconciliación y estabilización”.
La Alta Comisionada ha llamado al Gobierno de Kiev a garantizar que las operaciones militares y policiales se lleven a cabo de acuerdo con las normas internacionales. “Es extremadamente importante que las propias autoridades demuestren el pleno respeto del Estado de Derecho y proteger escrupulosamente los derechos humanos de todos, incluida la población de habla rusa”, enfatizó Colville.
“Los grupos armados de oposición deben detener todas las acciones ilegales, incluyendo la detención de las personas y la incautación de edificios públicos en violación de las leyes y la Constitución de Ucrania”, señaló. “Estos grupos organizados y bien armados deben deponer las armas, liberar a las personas detenidas arbitrariamente, y desocupar los edificios públicos y administrativos ocupados”, señaló.
Además, Pillay consideró esencial que las autoridades lleven a cabo una investigación pronta, transparente y exhaustiva sobre los acontecimientos en las regiones de Odessa y Donetsk que llevaron a la muerte a decenas de personas en los últimos días, incluyendo el incendio en el edificio sindical en Odessa el pasado viernes en donde al parecer perdieron la vida más de 40 personas.
ACNUDH subrayó que la Policía debería facilitar las manifestaciones pacíficas garantizando al mismo tiempo la protección de los participantes, independientemente de sus opiniones políticas, puesto que “hay una necesidad urgente de crear un ambiente donde se respete plenamente la libertad de expresión y opinión”.
Relacionado a esto, ACNUDH condenó todos los ataques contra, y el acoso de los periodistas. “Todas las partes deben dejar espacio a los periodistas para trabajar, esto es un elemento clave para poner fin a la creciente desinformación”, añadió.
Colville subrayó que la desinformación y el discurso de odio ha ido coloreando narrativas conflictivas y alimentando el desarrollo de divisiones artificiales, destructivas y profundamente peligrosas entre comunidades”. Incluso, los mismos periodistas “deben hacer grandes esfuerzos para ser objetivos, y para evitar la incitación”, sostuvo.
La oficina del ACNUDH tiene actualmente una misión de 34 observadores con base en cinco localidades y publicará un informe sobre sus hallazgos el 15 de mayo, adelantó. “Estamos profundamente preocupados por el aumento de la violencia en Ucrania, que se traduce en más y más muertes y destrucción. Instamos a todas las partes a hacer un esfuerzo mucho mayor para encontrar una solución pacífica a la crisis actual”, llamó ACNUDH.