BUENOS AIRES (AP) Una irregularidad en la votación entre el oficialista Luis Segura y el opositor Marcelo Tinelli por la presidencia del fútbol argentino dejó el jueves en suspenso ese acto electoral que fue postergado sin fecha, justo el día que recrudeció el escándalo por corrupción en la FIFA.
Poco después, Segura dijo que trataría de buscar un consenso con Tinelli para formar una lista única y evitar repetir esas elecciones.
Terminada la votación, los auditores detectaron un voto de más, que se habría producido debido a que un asambleísta colocó dos boletas en el mismo sobre, según dijo la AFA y después lo reafirmaron ambos candidatos.
El resultado marcaba un empate 38-38 entre Tinelli y Segura, cuando los votantes habilitados eran 75.
“Nos encontramos ante una situación realmente insólita. Evidentemente el resultado hubiese sido 38-37 no sabemos a favor de quien”, dijo Segura hablando a los asambleístas.
Segura destacó que si no logra una unidad con Tinelli “llamaremos nuevamente a elecciones”, aunque no dio fecha al respecto.
“Este hecho me consterna, me avergüenza, es un error que nos hace vivir una situación que nadie hubiese imaginado”, subrayó el actual presidente de Argentinos Juniors.
No hubo posibilidad alguna de volver a votar, ya que dos de los asambleístas se retiraron apenas sufragaron.
“Fue una situación insólita”, declaró Tinelli al hablar al igual que Segura a todos los asambleístas. “Quedamos sorprendidos y extrañados como están todos”.
Tinelli, vicepresidente de San Lorenzo, subrayó que aún no tiene pensado si aceptará la propuesta de Segura de formar una lista única y evitar nuevas elecciones.
“Esto fue casi un empate y por lo menos nos tenemos a sentar a hablar”, afirmó Tinelli, el animador más exitoso de la televisión local y casi novato en la dirigencia del fútbol.
Tinelli trata de desbancar a Segura, quien heredó el trono que dejó la muerte de Julio Grondona hace poco menos de un año y medio.
Horas antes de esa elección, dos dirigentes argentinos con fuerte gravitación en la AFA y en la Conmebol, figuraron entre los 16 nuevos acusados por las autoridades estadounidenses en el escándalo FIFA: José Luis Meizner, quien el martes renunció al cargo de secretario general de la Conmebol y de Eduardo de Luca, a quien el primero sucedió en ese puesto.
Meizner y Deluca, al igual que Segura, formaban parte del círculo de dirigentes íntimos de Grondona.
Hasta ahora, la dirigencia del fútbol nacional había quedado al margen del escándalo, que en el caso de Argentina afecta a tres empresarios.