“Resulta tan similar. Me entristece”, indicó Claire Bruyere, de Warwick, cuya hija Bonnie Hamelin de 27 años murió en 2003 durante el incendio en el club nocturno Station en West Warwick. “Ni siquiera quiero pensar demasiado al respecto”.
El incendio en el Station, uno de los más mortales ocurridos en un club nocturno en la historia de Estados Unidos, fue iniciado por juegos pirotécnicos durante un concierto de la banda Great White. Cien personas murieron y 230 resultaron heridas.
De manera similar, el incendio del viernes en el club nocturno Colectiv en Bucarest inició por pirotecnia que formaba parte del programa de una banda de heavy metal. El fuego de rápida propagación y la subsiguiente estampida en la presentación del grupo Goodbye to Gravity cobró la vida de al menos 27 personas y dejó heridas a otras 180.
“Esto me enferma”, comentó Victoria Eagan, de West Warwick y una sobreviviente del incendio en el club Station, en un mensaje vía Facebook en el que describe ambos siniestros como “escalofriantemente similares”.
“¿Nunca aprenderemos?”, escribió al tiempo que enviaba sus oraciones a las víctimas rumanas y sus familias. “Demasiado… esto necesita parar. Me siento muy triste”.
Otras dos personas que perdieron a sus hijos en el incendio de Rhode Island se dijeron decepcionadas de que los propietarios de clubes nocturnos y los promotores de conciertos aparentemente siguen ignorando las reglas de seguridad básicas para incendios y ponen sus ganancias por encima de los clientes. El fuego en el Station generó leyes más estrictas contra fuego para los reglamentos de construcción para edificios en Rhode Island.
“Simplemente no lo entiendo. Las personas creen que no les va a suceder a ellas”, dijo Dave Kane, de Johnston, Rhode Island, cuyo hijo Nicholas O’Neill de 18 años murió en el Station. “Pero siempre es lo mismo. Nada ha cambiado”.
Los sobrevivientes también recordaron otros incendios mortales en clubes nocturnos ocurridos en años recientes, incluido uno de 2013 en el que murieron más de 200 personas y cerca de 600 quedaron heridas en la ciudad de Santa María del sur de Brasil.
Chris Fontaine, de Johnston y madre de Mark Fontaine, de 22 años quien murió en el incendio en el Station_, señaló que ella trata de no involucrarse mucho en las tragedias más recientes debido a los dolorosos recuerdos que inevitablemente le generan.
“Todavía se siente como si fuera ayer”, declaró. “Y estas cosas siempre me lo ponen de nuevo en primer plano”.