El reporte anual de Derechos Humanos del Departamento de Estado destacó hoy que en 2014 se registró una tendencia notable de atrocidades cometidas por organizaciones terroristas como el Estado Islámico (EI) y Boko Haram.
Destacó que en Siria, el EI y la organización Habhat al-Nusra han tomado ventaja del caos causado por la guerra civil, en la que las fuerzas de seguridad gubernamentales y milicias afiliadas cometieron masacres, bombardearon vecindarios, maltrataron y abusaron a prisioneros y emplearon la violación como arma de guerra.
Asimismo, subrayó que el Ejército Islámico ejecutó 900 personas en Dayr al-Zawr, apedreó mujeres y hombres acusados de adulterio, crucificó civiles, impuso matrimonios forzados, violó y secuestró mujeres y niñas con propósitos de esclavitud sexual.
La organización terrorista ha decapitado además a periodistas extranjeros y trabajadores humanitarios, y publicado en las redes sociales videos sobre esos crímenes.
El Departamento de Estado señaló también que en Nigeria, el grupo terrorista Boko Haram ocasionó la muerte de más de cuatro mil civiles tan sólo el año pasado; secuestró a 273 estudiantes de secundaria, la mayoría de la cual continúa desaparecida, además de obligar al desplazamiento de miles de personas.
Resaltó que pese a que socios internacionales han movilizado una respuesta, los altos niveles de corrupción en el ejército nigeriano, junto con el récord pobre de derechos humanos entre los servicios de seguridad, debilitan los esfuerzos para combatir con efectividad a Boko Haram.
Finalmente, el informe señala el récord de violaciones a los derechos humanos en Corea del Norte, que constituyen de acuerdo con un reporte de Naciones Unidas crímenes en contra de la humanidad. Recordó testimonios sobre ejecuciones públicas, desapariciones, arrestos arbitrarios y tortura.