Luego que un invierno brutal en el hemisferio norte dio paso a la primavera, la economía de Estados Unidos está mostrando una fuerza renovada, mientras las de otros países parecen desesperadas por ayuda.
Europa pende de una recuperación frágil. Japón acaba de anunciar un aumento en los impuestos que amenaza el tambaleante regreso de su economía y los problemas de China están sacudiendo al resto del mundo.
La resistencia de la economía estadounidense después de un invierno crudo fue evidente en el reporte que se difundió el viernes. El Departamento del Trabajo informó que se crearon 192.000 empleos en marzo y 37.000 más en enero y febrero frente a lo que se calculó en un principio.
Con estos avances constantes, la Reserva Federal ha estado reduciendo su compra de bonos, una medida con la que buscó mantener bajas las tasas de interés y apuntalar el crecimiento.
“A Estados Unidos evidentemente le está yendo mejor que a Europa o Japón por el momento”, dijo Nariman Behravesh, economista en jefe de IHS Global Insight.
Aquí un vistazo al resto de las grandes economías del mundo:
EUROPA
Al igual que la Fed está reduciendo sus estímulos económicos en Estados Unidos, el Banco Central Europeo está contemplando adoptar más medidas para apuntalar a los 18 países de la zona del euro. La eurozona salió de recesión su segunda en seis años la primavera pasada. Sin embargo, la recuperación ha sido débil: crece 1% anual.
La zona euro también sufre de una preocupante tasa de desempleo de 11,9%, un poco menor al récord de 12,1% del año pasado.
Además, la inflación es peligrosamente baja, lo que ha despertado el temor de deflación. Esto es peligroso, porque una caída en los precios haría que consumidores y empresas pospusieran las compras e inversiones, esperando a que los costos desciendan aún más.
Otro problema fundamental de la eurozona es la falta de crédito. Los bancos, afectados por la cartera vencida que les dejó la crisis financiera, no están prestando a las pequeñas y medianas empresas.
JAPÓN
Tras dos décadas lentas, la economía japonesa recibió un impulso el año pasado con las políticas del primer ministro Shinzo Abe para incentivar la inflación y generar crecimiento fomentando que consumidores y empresas gasten ahora y no después.
Sin embargo, los esfuerzos de Japón para apuntalar su economía a través del gasto gubernamental han presionado a sus finanzas. La deuda del gobierno duplica a la economía nacional, por mucho la carga más grande para cualquier país desarrollado. Para reducir la deuda el gobierno subió el impuesto a las ventas de 5 a 8%.
Analistas de Citi prevén que la tercera economía mundial crecerá sólo 0,9% este año, comparado con 1,5% de 2013.
CHINA
La economía de más rápido crecimiento en el mundo se está desacelerando. Parte del enfriamiento, luego de incrementos de dobles dígitos de años recientes, es deliberado. El gobierno quiere crear una economía más robusta, más dependiente del consumo interno y menos supeditada a las exportaciones e inversión en infraestructura y bienes raíces. Además, las autoridades están dispuestas a tener un menor crecimiento para conseguirlo.
Sin embargo, ahora temen que la economía se esté desacelerando demasiado y no se cumpla con su meta de 7,5% para este año. La semana pasada Beijing anunció un programa de estímulos que concederá mayores beneficios fiscales a las pequeñas empresas, edificará viviendas nuevas en los barrios pobres y se intensificará la construcción de carreteras.