El presidente Barack Obama acudió sorpresivamente al Congreso el viernes en un intento de último momento para salvar su proyecto de ley de comercio al que considera de máxima prioridad y con el que espera sellar un acuerdo de libre comercio con once países del área del Pacífico.
La aparición del presidente en el Capitolio coincidió con el comienzo del debate del proyecto en la Cámara de Representantes.
El proyecto permitiría a Obama negociar acuerdos comerciales que el Congreso podrá aprobar o rechazar, pero sin introducirles cambios. Otros presidentes han tenido esa autoridad, que es calificada “de vía rápida”. La Casa Blanca desea recibir esa autoridad para concluir el acuerdo del Pacífico.
La norma, que será sometida a votación en la cámara baja en las próximas horas, enfrenta la oposición de un buen número de legisladores demócratas.
Obama convocó al bloque demócrata a una reunión especial a puertas cerradas en una sala del subsuelo del Capitolio.