Los hackers que irrumpieron en una base de datos federal robaron datos personales y números de seguridad social de todos los empleados del gobierno, dijo un sindicato federal, afirmando que el ciberataque es mucho más grave de lo que ha reconocido el gobierno del presidente Barack Obama.
El líder demócrata en el Senado, Harry Reid, comentó el jueves en el pleno de la cámara alta que la irrupción de diciembre pasado a la base de datos de la Oficina de Administración de Personal fue llevada a cabo por “los chinos”. Reid es uno de ocho legisladores que recibió la más reciente información de inteligencia al respecto.
J. David Cox, presidente del sindicato American Federal of Government Employees, escribió en una carta a la directora de la Oficina de Manejo de Personal, Katherine Archuleta, que, de acuerdo a los informes internos de su departamento, los hackers robaron registros militares e información del estatus de veteranos, direcciones, fechas de nacimiento, historial laboral y salarial, seguro de salud y de vida, información de pensiones; edad, género y raza.