WASHINGTON (AP) Republicanos y demócratas están enfrascados en un duelo sobre el futuro de la reforma del sistema de salud impulsada por el presidente Barack Obama, y el enfrentamiento podría decidir el equilibrio de poderes en Washington.
Los demócratas piensan que ya una vez antes perdieron la opinión pública sobre la ley, cuando la aprobaron en el Congreso, y los republicanos usaron el asunto para reducir a los demócratas a la minoría. Esta vez, los demócratas están decididos a ganar.
Por su parte, los republicanos saben que se están embarcando en la tarea de anular y reemplazar la compleja ley a su propio riesgo. Incluso si logran reformarla quedarán como responsables por cualquier problema y complicación que resulte del cambio, y ciertamente habrá muchos.
Para ambas partes, la pelea representa un riesgo y un reinicio inesperado casi siete años después que mayorías demócratas en el Congreso aprobaron la ley con oposición republicana. Un rechazo de los votantes arrebató a los demócratas su mayoría en la Cámara de Representantes en las elecciones legislativas del 2010 y los republicanos han estado usando el tema para beneficiarse políticamente desde entonces. En las elecciones de noviembre, Donald Trump y los candidatos republicanos a ambas cámaras hicieron campaña con promesas de anular la ley y reemplazarla con algo mejor.
Ahora, los demócratas tienen la oportunidad de pelear de nuevo por la opinión pública, al tiempo que continúan defendiendo la ley como una política buena que ha ayudado al país. Y los republicanos, que han tenido éxito político sin ofrecer una solución propia, tienen ahora la oportunidad de presentar sus ideas y crear políticas, pero se arriesgan a perder su ventaja si son culpados por los votantes por problemas en el sistema de salud.
La parte que responda al reto de forma más efectiva podrá determinar quién gana las elecciones legislativas en dos años y la próxima elección presidencial, en cuatro.
El miércoles, al dar a conocer el nuevo plan de ataque de los demócratas contra sus rivales, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo que después que la ley de salud fue aprobada, los votantes le echaron la culpa de todos los problemas del sistema de salud “y nuestros colegas republicanos y su máquina de mensajes lo hicieron”.
“Ahora, van a tener que asumir la responsabilidad”, dijo Schumer de los republicanos. “Y los problemas del sistema de salud, y ha habido muchos a lo largo de los años, nadie los ha resuelto todos, van a ser su responsabilidad”.
Schumer hizo los comentarios luego que legisladores demócratas se reunieron con Obama para discutir cómo combaten los esfuerzos republicanos para anular la ley. Una nueva iniciativa legislativa arrancó el miércoles con un voto de procedimiento en el Senado.
El mensaje de Obama: Que no cooperen con planes republicanos que no ofrezcan una buena solución para los 20 millones de estadounidenses que consiguieron cobertura de seguro médico bajo la ley. El presidente aconsejó mantener el foco en aquellos que se beneficiaron de la ley, tales como pacientes con padecimientos preexistentes que pudieran perder la cobertura si la ley es anulada.
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Erica Werner está en: https://twitter.com/ericawerner