LOS ÁNGELES (AP) Dave Roberts volvió el martes a la organización de los Dodgers de Los Ángeles, esta vez como el primer manager de una minoría racial en la historia de la franquicia.
“Es el empleo de mis sueños”, destacó Roberts durante una conferencia de prensa en el Dodger Stadium a la que asistió el inicialista mexicano Adrián González, el ex manager Tom Lasorda y dos leyendas del club, Don Newcombe y Maury Wills.
El copropietario Magic Johnson entregó a Roberts un jersey con el número 30, que el nuevo piloto se abotonó rápidamente por encima de su camisa azul y de la corbata a rayas. Roberts tomó su nueva gorra de los Dodgers y curvó la visera antes de colocársela.
Dijo que estaba tan concentrado en obtener el trabajo que no se percató de lo que representa ser el primer piloto de las minorías en el club. Su padre es de raza negra y su madre es japonesa.
“Hay mucha gente que ha allanado el camino para que yo tuviera esta oportunidad”, comentó. “Eso no se toma a la ligera”.
Acerca del motivo por el que ha habido pocos managers de las minorías en las Grandes Ligas, Roberts dijo, “no tengo idea, pero es una fortuna que yo sea uno de ellos”.
El ex jardinero central de 43 años, quien jugó en los Dodgers, nació en Okinawa, Japón, donde su padre estaba emplazado con los infantes de Marina.
Roberts viene de los Padres de San Diego, donde fue asistente del manager durante las últimas dos campañas.
Toma las riendas de un equipo que ganó tres títulos consecutivos de la División Oeste de la Liga Nacional bajo las órdenes de Don Mattingly, quien se marchó de la organización por acuerdo mutuo el mes pasado. Un mes después, Mattingly asumió el cargo de manager de los Marlins de Miami.
Los Dodgers no ganan la Serie Mundial desde 1988, pese a que el año pasado contaron con la nómina más alta en las mayores.
“No sucumbo ante la presión”, aseguró Roberts. “La gente debe tener expectativas y metas. La meta tiene que ser ambiciosa”.
Los Dodgers cayeron 3-2 ante los Mets de Nueva York en el quinto y decisivo juego de la serie divisional este año. Han llegado a la postemporada en tres años consecutivos, algo que jamás habían conseguido en la historia.
“Tenemos mucha confianza en que él va a desempeñar un papel significativo para formar una cultura de éxito sostenido acá”, dijo Andrew Friedman, presidente de operaciones deportivas de los Dodgers.
Roberts se retiró en 2008, luego de jugar 10 años en Cleveland, Boston, San Diego y San Francisco, además de Los Ángeles. De por vida, bateó para .266 con 243 robos.
En 2010, sobrevivió a una batalla con el linfoma de Hodgkin.